Los mélenchonistas piden al PS que no se abra al centro-derecha, pero no rompen con él
París, 8 dic (EFE).- La Francia Insumisa (LFI) de Jean-Luc Mélenchon está totalmente en contra de la apertura mostrada por sus socios socialistas hacia el centro-derecha para buscar compromisos para formar un Gobierno por un tiempo limitado y quiere que rectifiquen, pero no da por finalizada la coalición de izquierdas.
«Espero que los socialistas vuelvan a la razón», ha subrayado este domingo la jefa del grupo parlamentario de LFI en la Asamblea Nacional, Mathilde Panot, en una entrevista televisiva en la que ha dejado claro, en cualquier caso, que «el Nuevo Frente Popular (NFP) no está muerto».
Panot se ha reafirmado en su posición de que sólo consideran dos alternativas en la actual situación política tras la moción de censura con la que el miércoles tumbó a Gobierno del primer ministro conservador Michel Barnier: que le sustituya la candidata de la izquierda, Lucie Castets, o que dimita el presidente Emmanuel Macron.
Preguntada sobre cómo van a conseguir que Macron se vaya, cuando él reiteró el jueves que tiene intención de agotar su mandato, que termina en la primavera de 2027, la diputada mélenchonista ha explicado que le va a resultar imposible mantenerse hasta entonces si cae un Gobierno cada pocos meses.
«Cómo va a continuar con un primer ministro que va a saltar cada mes o cada dos meses», ha señalado, dando a entender que presentarán mociones de censura contra cualquier Ejecutivo que no esté dirigido por Castets, que es el nombre en el que coincidieron en verano todos los miembros del NPF
La continuidad de esta coalición, que constituyeron en junio LFI, el Partido Socialista (PS), el Partido Comunista Francés (PCF) y el ecologista EELV para presentarse a las elecciones legislativas anticipadas de comienzos del verano, ha quedado en entredicho.
La razón es la controversia entre sus componentes por la inflexión de los socialistas tras la moción de censura del miércoles, que también votaron.
En un encuentro con el jefe del Estado el pasado viernes, los dirigentes del PS dijeron estar dispuestos a llegar a compromisos con los macronistas y con la derecha conservadora de Los Republicanos a condición de que Macron nombre a un primer ministro de izquierdas para constituir un Gobierno temporal hasta que se puedan celebrar nuevas elecciones.
Los socialistas pidieron igualmente a Macron que hable también con los otros componentes del NFP ,y el presidente los ha convocado mañana en el Elíseo, pero LFI ha advertido que no irá porque lo que exige es que dimita porque, como ha insistido hoy Panot, pues su partido considera que «no respeta el resultado de las urnas» del pasado verano.
Sí que han confirmado que irán a la cita en el Elíseo tanto los comunistas como los ecologistas, pero falta por aclarar si ambos partidos estarían dispuestos a participar en una estrategia como la planteada por el PS.
En el otro extremo del arco parlamentario, Jordan Bardella, presidente de la Agrupación Nacional (RN), de extrema derecha, ha criticado que Macron no les haya convocado en la ronda de consultas para nombrar a un primer ministro, y ha advertido de que volverán a votar una moción de censura contra cualquier Gobierno que no cumpla sus cuatro «líneas rojas».
En otra entrevista a la televisión France 3, Bardella -mano derecha de Marine Le Pen- ha criticado que Macron no cuente con ellos y ha descalificado los posibles acuerdos entre formaciones de izquierdas y de centro-derecha, a su juicio sólo para impedir que se tenga en cuenta a los millones de electores que votaron al RN.
«¿Acaso somos subciudadanos?», se ha indignado el líder ultraderechista, que ha hecho hincapié en que RN es «el primer partido en la Asamblea Nacional».
Bardella ha repetido que votarán mociones de censura contra todo Gobierno que no cumpla con sus cuatro «líneas rojas» que son mantener el poder adquisitivo, en particular con la revalorización de las pensiones, no aumentar las cotizaciones ni los impuestos a las empresas, más acción por la seguridad y contra la inmigración y establecer un sistema proporcional en las elecciones legislativas. EFE
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