Israel vuelve a detener a Mohamed Allan, quien reanuda su huelga de hambre
El palestino Mohamed Allan reanudó su huelga de hambre este miércoles, después de que Israel lo pusiera nuevamente en detención administrativa, un controvertido régimen de cárcel potencialmente ilimitado sin inculpación ni juicio, informó por teléfono a la AFP su abogado, Jamil Al Jatib.
Allan estuvo al borde de la muerte al llevar a cabo una huelga de hambre anterior que duró casi dos meses, a la que puso fin cuando la justicia israelí levantó en agosto esta medida extrajudicial.
El abogado palestino, de 31 años de edad, fue arrestado este miércoles por la mañana en el hospital de Ashkelon (en el oeste), donde estuvo a punto de morir antes de que las autoridades israelíes suspendieran su detención administrativa.
Jatib dijo que Allan “se encuentra actualmente en huelga de hambre”, añadiendo que esperaba poder conocer los motivos de la detención de su cliente, pero que seguramente presentará el caso ante el Tribunal Supremo israelí.
La policía justificó la detención porque su estado de salud “ha mejorado”, por lo cual podrá cumplir la orden de detención administrativa que finalizaba el 4 de noviembre, sin indicar si será liberado en esa fecha o si las autoridades renovarán la detención administrativa.
– Huelga anunciada –
La víspera, el abogado palestino dijo que comenzaría una nueva huelga de hambre si lo volvían a encarcelar, dijo su padre, Abu Mutir, a la AFP.
Allan era casi desconocido antes de su huelga de hambre, que lo ha convertido en el símbolo de la lucha contra el régimen de detención administrativa.
Fue detenido el 6 de noviembre de 2014, en base a “testigos e informaciones según los cuales estaba en contacto con un activista terrorista de la Yihad Islámica para cometer atentados de gran alcance”, según fuentes de seguridad israelíes. La Yihad Islámica, una organización considerada terrorista por Israel, asegura que el abogado es uno de sus miembros.
En agosto, la huelga de hambre de Allan y la repercusión de su caso obligó a las autoridades israelíes a reaccionar y el Tribunal Supremo terminó suspendiendo la detención administrativa. Allan suspendió entonces la huelga de hambre, que le causó lesiones cerebrales.
Sin embargo, los jueces del Tribunal Supremo dejaron en suspenso la cuestión de su eventual retorno a la detención administrativa si mejoraba su estado de salud.
– Dilema para el gobierno israelí –
Según el padre de Allan, el hospital de Ashkelon había autorizado su traslado al hospital de Naplusa, en Cisjordania. “Lo detuvieron en el momento en que salía del hospital y lo trasladaron a Ramleh”, en un barrio de Tel Aviv. “Insisten en que permanezca detenido hasta la expiración de la orden de detención administrativa”, agregó.
La detención administrativa permite a las autoridades israelíes mantener en la cárcel a un sospechoso sin notificarle ninguna acusación durante seis meses, renovables indefinidamente. Más de 300 palestinos se encuentran en detención administrativa, según diferentes fuentes.
En 2006, Allan fue condenado a tres años de cárcel por sus actividades “tendientes a reclutar kamikazes”, según fuentes de seguridad israelíes.
El caso del abogado palestino plantea al gobierno un dilema, ya que por un lado no quiere ceder a la presión de un prisionero y, por el otro, teme una escalada de violencia si Allan llegara a morir durante su huelga de hambre.
Una ley adoptada en julio, que permite alimentar por la fuerza a los prisioneros en huelga de hambre para afrontar ese tipo de casos, complicó aún más la situación. Los médicos israelíes, indispensables para aplicarla, son hostiles a esta ley.
