Cómo se sitúan los otros actores clave luego de la cumbre Trump-Kim
La cumbre histórica entre el estadounidense Donald Trump y el norcoreano Kim Jong Un tendrá repercusiones en China, Corea del Sur y Japón.
Trump se ufanó de los méritos de un acuerdo que prevé “la desnuclearización completa” de la península coreana, aunque los observadores reprochen al texto de no ser más preciso.
La cumbre de Singapur deja muchas preguntas en suspenso. En particular vinculadas a los otros actores clave.
– China –
China, principal aliado de Pyongyang, y con quien Corea del Norte tiene el 90% de sus intercambios, mira con buenos ojos todo lo que pueda hacer disminuir la tensión en la vecina península.
Pekín saludó rápidamente el encuentro considerándolo como el comienzo de una “nueva historia”.
China se llevó una sorpresa adicional de la cumbre, luego de que Trump anunciara el fin de los ejercicios militares con Seúl, una práctica que Pekín siempre miró con desconfianza.
Este anuncio constituye asimismo la aceptación tácita de la propuesta defendida por el presidente chino Xi Jinping, es decir congelar los ejercicios militares a cambio de que se congelen los ensayos nucleares y balísticos norcoreanos.
Xi se reunió con Kim en dos ocasiones antes de la cumbre y conseva una considerable influencia en el tablero diplomático. China prestó incluso el avión a Kim para que viaje a Singapur.
– Corea del Sur –
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, está entre los que hicieron posible el encuentro de Singapur. Cuando la cumbre fue anulada por Trump, se esforzó para revertir la decisión.
Seúl y Pyongyang ya convinieron mantener encuentros regulares. La legitimación de Kim en la arena mundial hace más probable una visita de Moon a Pyongyang.
El Norte y el Sur trabajarían además para declarar el fin de la guerra de Corea (1950-1953). Los combates terminaron con un armisticio pero no un tratado de paz. Los dos países siguen técnicamente en guerra.
Pero al igual que todos los otros, el mando militar surcoreano quedó sorprendido con la declaración unilateral de Trump sobre el fin de los ejercicios militares. Ello reforzaría los argumentos de los conservadores surcoreanos que reclaman que Seúl desarrolle sus propias armas atómicas.
– Japón –
La reacción japonesa fue claramente menos entusiasta que la de otros países. Tokio está directamente amenazado por los misiles norcoreanos y depende de Estados Unidos para su defensa.
La anulación de las maniobras pareció irritar a Tokio, el ministro de Defensa, Itsunori Onodera, dijo que tenían un “papel vital” para la seguridad en la región.
Sobre el tema extremadamente sensible de los japoneses secuestrados por Corea del Norte hace décadas, el primer ministro Shinzo Abe saludó el hecho de que Trump haya evocado aparentemente el tema durante la cumbre. Pero no parece haber avances tangibles.
Abe dijo que quería hablar directamente el tema con Kim.
– Estados Unidos –
Dada declaración firmada por Kim y Trump, que no contiene precisiones sobre la desnuclearización, los representates de los dos países están delante de negociaciones largas y difíciles.
Según Trump, importantes reponsables estadounidenses, entre ellos el halcón John Bolton, asesor de Seguridad Nacional, estudiarán los detalles la próxima semana.
Según la agencia oficial norocoreana, KCNA, Kim y Trump aceptaron invitaciones a Washington y a Pyongyang.
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