EEUU y México esperan que la agricultura sea ejemplo de bondades del TLCAN
Los ministros de Agricultura de México y Estados Unidos coincidieron este viernes en que su sector es un “ejemplo” de los beneficios que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que integran junto a Canadá, ha traído a los tres países.
La declaración ocurre a menos de un mes del inicio una renegociación del acuerdo, que está vigente desde 1994 pero que ha sido fustigado por el presidente estadounidense Donald Trump, argumentando que ha eliminado empleos y alejado inversiones de su país.la
“Esperamos poder utilizar la agricultura como un ejemplo de cómo la integración de nuestras economías puede beneficiar a ambos pueblos … no solo a México y Estados Unidos sino también en Canadá”, dijo el ministro estadounidense Sonny Perdue en una conferencia conjunta con su par mexicano José Calzada en el estado de Yucatán (este).
Perdue, quien realizó una visita de dos días a México, aseguró que estos beneficios están “bien demostrados” en su sector y que espera poder comunicarlos a sus colegas al mando de la política económica y comercial estadounidense, así como al propio presidente Trump.
Sin embargo, de cara a la renegociación, cuya primera ronda irá del 16 al 20 de agosto, el funcionario estadounidense lamentó que el sector agrícola sea “utilizado siempre como medida de represalia” en las mesas de negocios.
“Nuestra meta, ante todo, es no hacer daño en los sectores agrícolas”, dijo Perdue en una conferencia telefónica posterior a la presentación con su homólogo mexicano.
Agregó, no obstante, que a diferencia del agrícola otros sectores en su país como el manufacturero no han recibido los mismos beneficios del acuerdo comercial por lo que el presidente Trump “está muy legítimamente preocupado”.
– Depurar y mitigar diferencias –
Perdue destacó los estrechos lazos con México y restó importancia a preocupaciones de que el país latinoamericano pueda virar hacia Argentina o Brasil como proveedores de soja o maíz si el suministro estadounidense se interrumpie.
“No recibí ningún indicio de que estén considerando eso seriamente”, afirmó.
Calzada, por su parte, dijo que lejos de ser un problema, la renegociación del TLCAN es una “gran oportunidad” de seguir consolidado los avances hechos en los últimos años.
“Nos ha ido muy bien, creo que tenemos que depurar algunas cosas”, sostuvo Calzada, quien espera que la revisión del acuerdo haga énfasis en la complementación de los sectores entre los tres países.
Señaló como temas a mejorar el acceso de los productos mexicanos por las aduanas, la capacidad de rastrearlos desde que se producen hasta llegar al consumidor final, así como el intercambio de información logística.
A su turno, Perdue aseguró que están discutiendo la manera de mitigar algunas injusticias que puedan existir en la relación comercial, pero que no es posible comprometerse a beneficiar por igual a todos los productores pues esto colapsaría el acuerdo.
“Necesitamos ser patriotas en el sentido de ver qué es lo más conveniente para nuestros países como un todo”, afirmó en la conferencia conjunta.
El TLCAN es vital para la economía mexicana, pues le permite vender a Estados Unidos, libre de aranceles, una vasta gama de productos, principalmente manufactureros y agrícolas, constituyéndose como su principal mercado y socio comercial.
Un 80% de las exportaciones mexicanas tienen como destino exclusivo a su vecino norteño.
