La Asamblea de la OEA se instala en Cancún con la mirada puesta en Venezuela
La Asamblea General de la OEA se instala este lunes en la localidad mexicana de Cancún con la mirada puesta en Venezuela, cuya crisis política ha dejado más de 70 muertos en dos meses de protestas.
En el marco del encuentro en este balneario del Caribe mexicano se incluyó en el último momento en la agenda una reunión especial de ministros de Exteriores sobre Venezuela, después de que el encuentro inicial del 31 de mayo en Washington fuera cancelado por falta de consenso.
Los trabajos arrancarán con una conferencia del ministro mexicano de Exteriores, Luis Videgaray, y el secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro.
Al caer la noche, será la inauguración y a mitad de la jornada se producirá la espinosa reunión de ministros sobre la crisis en Venezuela.
Estas reuniones especiales de las que se espera un pronunciamiento de consenso sobre el país sudamericano son un punto espinoso, ya que fueron el detonante para que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunciara el comienzo del proceso de salida de su país de la OEA, lo que tardará dos años.
Venezuela inscribió una delegación para la Asamblea, ya que sigue siendo miembro con plenos derechos.
Si bien la OEA anunció el sábado que la ministra venezolana de Exteriores, Delcy Rodríguez, encabezaría la representación de Venezuela, fuentes diplomáticas precisaron que lo hará el embajador permanente de ese país en el organismo, Samuel Moncada.
Sin embargo, Rodríguez ya ha hecho sentir su presencia en la Asamblea con una serie de tuits en los que denuncia supuestas agresiones contra delegados venezolanos.
Rodríguez hizo responsables al ministro mexicano Videgaray y a Almagro “de la integridad física de nuestros diplomáticos conforme a la ley internacional”.
Fuentes diplomáticas y policiales consultadas por la AFP dijeron que no fueron informados de ninguna agresión.
Un manifestante opositor venezolano, que pidió no ser identificado, aseguró que una decena de ellos estuvo cerca del hotel donde se celebra el encuentro y que se limitaron a mostrar pancartas y lanzar consignas contra el gobierno de Maduro desde las vallas de seguridad instaladas por guardias presidenciales.
– En busca de consenso –
La OEA abordará la crisis venezolana con marcadas divisiones y con aliados firmes de Caracas, sobre todo Nicaragua y Bolivia.
La misión de los ministros de Exteriores, acechada por nubarrones semejantes a los que amagan con jornadas de lluvias en este exclusivo balneario, es adoptar una resolución de consenso a partir de dos proyectos distintos.
Los 14 países de la Comunidad del Caribe (Caricom), que durante años se han beneficiado de las entregas subsidiadas de petróleo venezolano, proponen que la solución de la crisis venezolana sea “interna” y “basada en un diálogo” entre gobierno y oposición.
En el otro extremo, Perú, Canadá, Estados Unidos, México y Panamá impulsan la creación de un “grupo de contacto” para acompañar un nuevo proceso de negociación.
En las calles de Cancún, la oposición venezolana, que en los últimos años ha venido a buscar una vida mejor en este destino turístico, también se ha hecho notar.
Decenas de venezolanos se manifestaron el domingo, cuando empezaron a llegar los delegados, en el aeropuerto y cerca del hotel sede bajo el lema “OEA, no nos des la espalda”.
“No estamos hablando de una intervención injerencista como pretende manipular el Gobierno la situación, sino una intervención del punto de vista de hermandad (…) de los pueblos de América para que se solucione el problema”, dijo a la AFP Juan Trull, uno de los portavoces de la comunidad venezolana en Cancún, estimada en unas 1.000 personas.
Venezuela es sacudida por protestas callejeras diarias desde el 1 de abril, después de que el Tribunal Supremo minara los poderes del Legislativo.
El llamamiento de Maduro a una Asamblea Constituyente recrudeció las manifestaciones, que ya suman más de 70 muertos.
