Un ciudadano de EEUU preso en Irán obtiene libertad por cuatro días
Las autoridades iraníes autorizaron el domingo la salida de prisión por cuatro días a Baquer Namazi, el más anciano de un grupo de estadounidenses detenidos en la República Islámica, aduciendo razones humanitarias.
Su abogado, Jared Genser dijo que Namazi, de 81 años, exfuncionario de UNICEF, no puede salir de Irán y tiene prohibido hablar con los medios. Su hijo, Siamak Namaz, consultor empresarial, continúa detenido. Ambos poseen la doble nacionalidad iraní-estadounidense.
Namazi fue sometido a una operación cardíaca de emergencia en setiembre pasado para instalarle un marcapasos.
“Nos congratulamos por la liberación de Baquer Namazi, dado su deteriorado estado de salud, pero hacemos notar que su liberación es sólo temporaria”, dijo la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, en un comunicado.
“Llamamos a la inmediata liberación total de la familia Namazi, incluido su hijo Siamak, así como la de los otros estadounidenses injustamente retenidos por el gobierno iraní”.
Los Namazi fueron condenados a 10 años de prisión por “espionaje y colaboración con el gobierno estadounidense” en octubre.
Xiyue Wang, un investigador sino-estadounidense de la universidad de Princeton University también recibió una pena de 10 años por espionaje.
El exagente del FBI y contratista de la CIA Robert Levinson desapareció en marzo de 2007.
Washington y Teherán carecen de relaciones diplomáticas desde abril de 1980 en el marco de la Revolución islámica y las tensiones se incrementaron bajo Trump, luego de un breve acercamiento durante la presidencia de su predecesor, Barack Obama.
Ambos países junto a otras potencias firmaron un acuerdo el 14 de julio de 2015 con el objetivo de limitar el programa nuclear iraní. Washington se mantiene en el acuerdo pese a tempranas amenazas de Trump de “hacerlo trizas”.
