AI denuncia la persecución del Estado contra las activistas en Bielorrusia
Moscú, 8 mar (EFE).- Amnistía Internacional (AI) denunció hoy que ” las organizaciones feministas en Bielorrusia son objeto de una persecución dirigida por parte del Estado”, en un comunicado en el que subrayó el importante papel de las activistas en la lucha por los derechos humanos.
AI entrevistó a varias detenidas e interrogadas por los agentes del orden bielorrusos, que denunciaron que la policía les acusó de ser “malas madres” y “malas esposas”, con amenazas de quitarles a sus hijos.
“Durante las detenciones enfrentaron acciones crueles, algunas fueron encarceladas en base a causas penales injustificadas”, señaló la ONG.
La representante de AI en Bielorusia, Aisha Jung, enumeró a varias mujeres que han sido represaliadas en elpaís, entre ellas Svetlana Tijanóvskaya, candidata a la Presidencia obligada a emigrar, y la jefa de su campaña electoral, María Kolésnikova, actualmente encarcelada.
Según Jung, ellas “son apenas algunas de las muchas cuyos nombres se convirtieron en sinónimo de la lucha por la libertad y los derechos humanos en Bielorrusia”.
“En una sociedad profundamente patriarcal con una difusión generalizada de la violencia doméstica, las mujeres en Bielorrusia arriesgaban mucho al defender sus convicciones. Ahora las autoridades bielorrusas toman medidas aún más crueles contra las activistas, sus organizaciones y familias”, añadió.
Es por ello que AI hizo un llamamiento a solidarizarse con las “valientes mujeres de Bielorrusia” en su lucha por la libertad y los derechos humanos.
La víspera, la líder de la oposición bielorrusia en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya, instó a la comunidad internacional a expresar su solidaridad con las mujeres de su país, que encabezan la lucha contra el régimen de Alexandr Lukashenko.
El movimiento opositor bielorruso, galardonado el año pasado con el Premio Sájarov y representado por Tijanóvskaya, tuvo desde un principio rostro de mujer en forma de la troika formada por esta antigua profesora de inglés, María Kolésnikova y Veronika Tsepkalo.
Las tres se unieron en torno a la campaña de Svetlana Tijanóvskaya, que se presentó en lugar de su marido a las elecciones presidenciales del 9 de agosto de 2020.
Lukashenko ganó con más del 80 % de los votos los comicios frente al 10 % que obtuvo Tijanóvskaya, un resultado no reconocido por Occidente y que dio lugar a las mayores protestas en la historia postsoviética de Bielorrusia, que fueron brutalmente reprimidas.
Miles de mujeres salieron a continuación a las calles bielorrusas con flores en las manos para exigir de manera pacífica la renuncia de Lukshenko, la liberación de todos los presos políticos y el fin de la represión. EFE
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