Incidente en base estadounidense en Inglaterra no fue de origen terrorista

Foto de la Fuerza Aérea de EEUU divulgada el 18 de diciembre de 2017 muestra a un avión de abastecimiento KC-135 Stratotanker despegando para una misión sobre el Mar del Norte desde la base británica de Mildenhall, en el este de Inglaterra, el 25 de julio de 2006. afp_tickers

La irrupción de un vehículo en un puesto de control de una base estadounidense en Inglaterra y los disparos de réplica realizados por personal militar norteamericano no están relacionados con la amenaza terrorista, indicó la policía este lunes.

«La investigación de un incidente en RAF Mildenhall confirma que el hecho no está relacionado con la amenaza terrorista», afirmó la policía de Suffolk (este).

La policía británica había detenido a un hombre en una base aérea estadounidense este lunes luego de que un vehículo irrumpió en un punto de control, obligando a militares de EEUU a abrir fuego, según varias fuentes.

El incidente ocurrió en RAF Mildenhallm, sede del ala 100ª de reabastecimiento aéreo de la Fuerza aérea estadounidense.

Mildenhall, ubicada a 110 km al noreste de Londres, fue brevemente cerrada al producirse el incidente, pero se reabrió a las 14H35 GMT, según un portavoz de la base.

La policía local indicó que recibió un llamado a las 13H40 GMT con información de que tenía lugar un «incidente», pero que «la base fue segurizada y las unidades respondieron de inmediato».

«Fueron hechos disparos por el personal de servicio estadounidense y un hombre fue detenido con cortes y hematomas y puesto bajo custodia», indicó.

«Ninguna otra persona resultó herida en el incidente», agregó.

El británico, de 44 años, fue detenido por sospechas de ingreso ilegal al lugar y los investigadores no buscan a nadie más.

La base estuvo involucrada en un frustrado complot terrorista en 2015.

Un individuo que apoyaba al grupo yihadista Estado islámico (EI), de nombre Jnead Khan, fue condenado a cadena perpetua por usar sus funciones de conductor de un vehículo de mensajería de una empresa farmacéutica para espiar en varias bases del este de Inglaterra, entre mayo y julio de 2015, entre ellas la de Mildenhall.