
Las 5 claves de la marcha de Evo Morales que el Gobierno considera un «golpe de Estado»
Esteban Biba
La Paz, 23 sep (EFE).- La marcha de miles de personas que el expresidente y líder oficialista, Evo Morales (2006-2019), encabeza a través del altiplano de Bolivia llega este lunes a la ciudad de La Paz, bajo las consignas de «¡Evo presidente!» y «¡Lucho (Arce) traidor!», y el mandatario, Luis Arce, ya la calificó como un «golpe de Estado» en su contra.
Morales exige que se le habilite como candidato presidencial para las elecciones de 2025, a pesar de una prohibición constitucional, y en una reciente entrevista a EFE dijo que Arce tiene «cuatro planes» en su contra, entre estos «matarlo», antes que dejarlo ser presidente otra vez.
Por su parte el presidente Arce dijo, en un mensaje televisado la víspera, que quiere dialogar con Morales pero que no caerá en su juego de generar una «guerra civil» en la que busca imponer su candidatura «a las buenas o a las malas».
A continuación cinco claves para entender la marcha de Morales y la larga batalla oficialista:
1. ‘Marcha para salvar Bolivia’
El martes miles de seguidores de Evo Morales conocidos como ‘evistas’ iniciaron una marcha de 187 kilómetros por el altiplano boliviano guiados por el expresidente y que, según sus organizadores, tiene el objetivo de ‘salvar Bolivia’ porque Arce tiene «hundido» al país con una crisis económica por falta de dólares y escasez de combustible.
Evo Morales, quien también lidera el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) desde hace 27 años, ya fue presidente de 2006 a 2019, a pesar de un referendo constitucional realizado en 2016, en el cual la población votó en contra de la doble reelección continua o discontinua. Morales insiste en su candidatura con el argumento de que ser reelecto es «un derecho humano».
2. ‘Marcha de la muerte’
Antes de iniciar la marcha de los ‘evistas», el presidente Arce, quien termina su mandato en noviembre de 2025, calificó la movilización como un «golpe de Estado» para acortar su gestión.
Los ministros de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo, y la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, llamaron la caminata de Morales la ‘Marcha de la muerte’ y han denunciado varios incidentes violentos, como el enfrentamiento de mineros afines a Arce o ‘arcistas’ contra los ‘evistas’ en un intercambio de petardos y pedradas el miércoles, en donde ambas facciones oficialistas reportaron heridos y una periodista fue golpeada.
3. La pugna por el MAS
Arce y Morales libran desde finales del 2021 una batalla por el control del oficialista MAS y el Ejecutivo.
Debido a la división del MAS entre ‘evistas’ y ‘arcistas’ no se ha realizado el obligatorio cambio de junta directiva ni el nombramiento de nuevos candidatos.
Ambos sectores por separado han hecho congresos para cambiar la junta directiva y los ‘evistas’ nombraron a Morales «candidato único», pero el Tribunal Electoral no ha aceptado ningún encuentro e insiste en que ambas facciones se unan para que sea válido, cosa que no ha sucedido.
Morales también sufrió el golpe de que en este proceso se suspendiera las elecciones primarias, por decisión de los partidos opositores y el Gobierno.
4. ¿De quién es la culpa de la crisis?
Morales culpa a Arce, quien fue el ministro de Economía de su Administración, y dijo a EFE que el presidente se «vendió a la derecha», quiere «achicar el Estado» y por eso hay una crisis, por seguir la «fórmula del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional», y agregó que el mandatario no cambió a tiempo la matriz energética del país por «no seguir sus consejos».
Por su parte Arce culpa Morales, entre otras cosas por no invertir en nuevas exploraciones para la obtención de gas natural, producto del que hasta hace poco dependía la economía boliviana, siendo sus principales clientes Argentina y Chile. También afirma que los proyectos de Morales de extracción de litio por medio de piscinas de evaporación fueron un fracaso.
5. Un país convulsionado
La oposición y varios sectores sociales denuncian que la pelea oficialista entre Arce y Morales desestabiliza al país, haciendo que Bolivia sea un país poco atractivo para la inversión debido a los constantes bloqueos y enfrentamientos.
Así lo dijo en sus redes sociales el expresidente y líder de la oposición Carlos Mesa (2003-2005): «Es innegable que la amenaza de convulsión social en Bolivia responde a una pelea interna entre Arce y Morales por el control de su partido, así como la crisis económica se generó por la ineficiencia de ambos cuando gobernaban juntos». EFE
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