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Los conservadores usan reparaciones para mejorar posición en Polonia y Europa

Łukasz Olender

Varsovia, 14 sep (EFE).- El ultraconservador partido gubernamental Ley y Justicia (PiS) ha reavivado el debate sobre la reclamación a Alemania de reparaciones por la II Guerra Mundial, a un año de las elecciones parlamentarias, aunque algunos ciudadanos temen que esto complique más aún la situación de su país en Europa.

A principios de septiembre el PiS presentó un informe sobre las pérdidas de Polonia en la II Guerra Mundial iniciada por la Alemania nazi que sus autores estimaron en 6.220.609 millones de zlotys (aproximadamente 1,35 billones de euros).

Durante la presentación del informe, el líder del PiS, Jarosław Kaczyński, anunció que Polonia se dirigirá al Gobierno alemán “para retomar la cuestión en un foro internacional y en el marco de las relaciones polaco-alemanas”.

Kaczyński añadió que Alemania nunca ha saldado las cuentas por sus crímenes contra Polonia.

Posteriormente, el Ministerio de Asuntos Exteriores informó de que el documento fue entregado al coordinador alemán de cooperación con Polonia, Dietmar Nietan.

Sin embargo, según el profesor de ciencias políticas de la Universidad de Varsovia Rafał Chwedoruk, el PiS podría querer utilizar el reavivado debate sobre las compensaciones para mejorar su posición dentro del país antes de las elecciones parlamentarias del próximo año, y en Europa al mismo tiempo.

“El PiS pretende presentar el conflicto entre el gobierno y la Comisión Europea como parte del conflicto entre Polonia y Alemania. La sociedad polaca no entendería el conflicto entre Polonia y la UE, pero el conflicto entre Polonia y Alemania puede ser hasta cierto punto aceptable, incluso para algunos de los votantes más liberales” – dijo a EFE.

Subrayó que la experiencia de la II Guerra Mundial es probablemente lo más importante de la historia polaca.

“Gran parte de los votantes, aunque no sea una gran mayoría, apoya las reivindicaciones polacas frente a Alemania. Especialmente las generaciones polacas de mayor edad tuvieron padres o abuelos que presenciaron o participaron en esa guerra”, dijo.

El académico señaló que el PiS ha tenido los problemas más grandes desde que llegó al poder.

En agosto, la oficina de estadística polaca informó de que la inflación se situaba en el 16,1 % interanual y según un estudio de la Universidad WSB y la consultora UCE Research, los precios en los comercios minoristas subieron de media un 23,7 % respecto al año pasado.

“Casi todos los sondeos de opinión muestran que no podrá formar gobierno tras las elecciones. En segundo lugar, observamos un rápido deterioro de la situación económica en el país, que ha desmovilizado al electorado de Ley y Justicia. El sentimiento de inseguridad entre el electorado dominado por los votantes menos pudientes afecta al apoyo a este partido”.

Justyna Łukasiewicz, propietaria de una empresa de construcción que normalmente vive fuera de Polonia, teme que las exigencias del gobierno resulten contraproducentes.

“El gobierno está exagerando las exigencias. Está claro que está bien negociar, pero puede iniciar toda una avalancha”, dijo a Efe.

Según Łukasiewicz, “influirá en toda la compleja situación”, en la posición de Polonia en Europa y en el mundo también.

“Las exigencias también pueden perjudicarnos. Si llevamos las cosas a un punto crítico, entonces todas las familias alemanas que tuvieron que abandonar el oeste de Polonia, pueden comenzar también con demandas”, agregó.

Ella misma procede de una familia repatriada después de la guerra a las tierras occidentales que Polonia recibió por el territorio que perdió a favor de la URSS tras la contienda.

“Creo que se trata de desviar la atención de otras cosas, de caldear la política antes de las elecciones. El gobierno quiere desviar la atención de lo difícil que son las cosas introduciendo otro tema polémico”, dijo.

En opinión de Helena, una oficinista de Varsovia, la intensificación del conflicto con Alemania afectará negativamente a la imagen de Polonia en Europa.

“Sólo hacemos el ridículo. Se tenía que haber hecho antes”, dijo a Efe.

Chwedoruk señaló que la sociedad polaca sigue siendo claramente occidental y no aceptará un conflicto con la Unión Europea.

“No hay espacio en la escena política de Polonia para un partido euroescéptico. Cualquier partido que entre en un conflicto serio con las principales instituciones europeas tendrá un problema con sus propios votantes”, afirmó.

Sin embargo, en opinión de Chwedorczuk, la narrativa del PiS se utilizará para compensar las difíciles relaciones con las instituciones europeas y las principales entidades de la comunidad europea: Francia y Alemania.

“PiS podría querer utilizar la actual debilidad de Alemania para reforzar la posición de Polonia ante las instituciones europeas y ante Alemania. PiS nunca tuvo aliados en partidos conservadores fuertes de Europa Occidental”, indicó.

Agregó que “hasta hace poco estaba aliado con el Fides húngaro, que podía jugar bien los juegos complicados en Europa, pero debido a la postura de Hungría sobre la guerra en Ucrania, los lazos se han debilitado”. EFE

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