Powell no conmueve a los opositores a la guerra
Su llamado a una intervención militar contra Irak no convenció a los pacifistas, según el presidente suizo.
Sin embargo, en entrevista con swissinfo, Pascal Couchepin consideró positivo el discurso del secretario de Estado estadounidense.
“Colin Powell es un gran orador”, constató Pascal Couchepin al referirse al discurso pronunciado este domingo (26.01) por el funcionario estadounidense en el Foro Económico Mundial (WEF) de Davos.
No obstante, añadió, “no hay nada nuevo en sus palabras, con excepción del énfasis que puso para justificar la necesidad de una acción militar contra Irak”.
El también ministro suizo del Interior manifestó sus dudas sobre la posibilidad de que los propósitos expresados por Colin Powell hayan convencido a quienes ponen en tela de juicio las bases de la política estadounidense con relación a Irak.
Pascal Couchepin estimó, sin embargo, que el discurso de Colin Powell confirmaba la posición estadounidense.
Un llamado a la acción militar
El discurso de Colin Powell -pronunciado ante unos 2.000 líderes políticos y un buen número de hombres de negocios- constituyó un firme llamado a una acción militar contra Irak.
El funcionario fustigó a aquellos que exigen que esa acción esté sujeta a una nueva resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
El secretario de Estado precisó que su país se reserva el derecho de atacar solo a Irak si el Consejo de Seguridad y otros gobiernos renuncian a arreglar el problema del desarme de Bagdad.
“El multilateralismo no puede servir de excusa para la inacción”, declaró Powell.
“Mantenemos nuestro derecho soberano a lanzar una acción militar contra Irak, solos o con una coalición”, subrayó.
Irak en el centro del WEF
El discurso del funcionario estadounidense fue sin duda el punto fuerte del Foro Económico Mundial de Davos, una cumbre dominada por la perspectiva de una guerra en Irak.
Tanto es así que numerosos observadores del WEF se manifestaron sorprendidos por el sentimiento antiestadounidense de las discusiones efectuadas en la estación invernal suiza de los Grisones.
La cumbre de Davos reflejó igualmente el malestar de los políticos europeos -y suizos- frente a la postura de Washington respecto a Irak.
En referencia a las reservas de países como Francia y Alemania, Powell afirmó, por otra parte, que “los problemas con nuestros amigos de ultramar se remontan a tiempo atrás, muchos siglos, si mis cuentas son buenas, y las diferencias son inevitables”.
“Sin embargo, añadió el secretario de Estado, esas diferencias no deben ser asimiladas al unilateralismo o la arrogancia por parte de Estados Unidos”.
Colin Powell recordó a los participantes en el WEF que los estadounidenses habían salvado a Europa “de la tiranía del fascismo”, y habían probado, en diversas ocasiones, que merecían la confianza de sus aliados.
En lo que concierne a Irak, ustedes pueden confiar en nosotros, declaró en sustancia el funcionario.
Fuerza y diplomacia
Colin Powell aseguró que “Estados Unidos no tiene prisa de ir a la guerra”, y busca un “arreglo pacífico de la crisis”. Pero añadió que Washington “no faltará a sus obligaciones delante de una guerra si ésta es el único medio de deshacerse de las armas iraquíes de destrucción masiva”.
Pascal Couchepin aplaudió la voluntad declarada de Estados Unidos de combinar la fuerza y la diplomacia para arreglar la crisis iraquí.
“Es verdad que Estados Unidos ha utilizado siempre esas dos armas. Colin Powell expresó muy bien esa estrategia”, declaró el presidente suizo.
swissinfo, Jacob Greber, Davos, (traducción y adaptación Marcela Águila)
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