Chile se prepara para un temporal que volverá a poner a prueba su sistema eléctrico
Santiago de Chile, 11 jun. (EFE).- Chile se prepara para un temporal de lluvia y viento que comenzará este jueves y que volverá a poner a prueba la fiabilidad de su sistema eléctrico tras los cortes de suministro que experimentó el país en febrero pasado.
El sistema frontal afectará a la zona centro-sur, donde se esperan precipitaciones «de entre 25 y 40 milímetros, concentrados especialmente durante la madrugada del día jueves», informó este miércoles en rueda de prensa Antonio Moncada, meteorólogo de la Dirección Meteorológica de Chile.
Este temporal vendrá acompañado de viento, que pueden alcanzar los 80 kilómetros por hora en la costa de la zona central y en «lugares abiertos y rurales» de Santiago, mientras que en el centro de la ciudad los valores oscilarán entre los 20 y 40 kilómetros por hora, de acuerdo al especialista.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, emplazó por su parte a las eléctricas a redoblar los sistemas de prevención y a no alegar «caso fortuito ante eventos predecibles».
«Sabemos que esta semana tendremos combinación de lluvia y viento en toda la zona central y centro sur del país. Las empresas proveedoras de electricidad no pueden alegar ‘caso fortuito’ ante eventos predecibles. El Estado está tomando todos los resguardos necesarios pero aquí todos tienen que hacer bien la pega», dijo el lunes el mandatario en X.
La Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), por su parte, instó este miércoles a las empresas de telecomunicaciones a activar planes y protocolos de emergencia «que permitan resguardar la conectividad digital».
El pasado 25 de febrero, el 98 % de todo el territorio chileno quedó sin electricidad ni conexión durante más de ocho horas en el mayor apagón registrado en el país en 15 años, solo comparable al ocurrido tras el terremoto de 2010.
La interrupción del fluido eléctrico obligó al Gobierno a decretar el estado de excepción y el toque de queda nocturno y mostró la fragilidad del país suramericano en este sector estratégico, que está prácticamente privatizado desde la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
En una declaración pública desde el palacio de La Moneda, Boric culpó entonces al sector privado del gran apagón y aseguró que «la situación debió haber estado regularizada mucho más temprano».
En agosto pasado, otro sistema central, que incluyó inusuales ráfagas de viento de más de 120 km/h, dejó sin electricidad a parte de Santiago debido a la caída de árboles y postes y hubo barrios que lleragon a estar cerca de un mes sin luz. EFE
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