
Cuatro mujeres en la vanguardia del avance de los árabes en la política israelí

Imán al Jatib será la primera diputada de la historia de Israel con velo islámico. En las últimas legislativas, la presencia de las mujeres árabes israelíes en el parlamento se reforzó con el avance del partido político de esta minoría.
De 54 años, Jatib llegará a la Knéset, el parlamento israelí, con otras tres electas de la «Lista Unida» y una mujer drusa del partido centrista «Azul-Blanco», que asumirán en sus bancas la semana próxima.
En Israel, los principales partidos están liderados por hombres, y las mujeres solo representan el 25% en la cámara de diputados.
Pero en las elecciones del 2 de marzo, la «Lista Unida» de los partidos árabes israelíes duplicó su número de mujeres electas al parlamento, de dos a cuatro. Esta fuerza obtuvo un total de 15 bancas sobre 120, dos más que en los comicios de septiembre pasado.
Este partido recibió la mayor parte de su apoyo de la minoría árabe israelí -cerca del 20% de la población del país-, que acusa el primer ministro, Benjamin Netanyahu, de discriminación y de tratarlos como ciudadanos de segunda clase.
«No hagan del velo una barrera. Miren las cualidades de la persona que lleva velo: su ética, su trabajo, sus competencias y sus actitudes», dijo Imán al Jatib en una entrevista la AFP.
«Hay mujeres judías religiosas en la Knéset. No escuchamos ningún comentario sobre el tema», agregó.
– Sin empleo –
Como otras diputadas árabe-israelíes, Imán al Jatib habla perfectamente hebreo. Estudió servicios sociales en la Universidad de Tel Aviv, con especialización en apoyo a las mujeres.
Cerca del «64% de las mujeres (árabes) están sin empleo, no porque no quieran trabajar, sino a raíz de la condiciones de trabajo y las dificultades para trasladarse», dice Jatib, que quiere que estos temas sean «puestos sobre la mesa en la Knéset.»
Sin embargo, los diputados recién electos podrían ocupar sus cargos solo por unos meses, ya que ningún partido logró la mayoría de 61 votos necesaria para formar gobierno.
Netanyahu (derecha) y su rival de centro, Benny Gantz, negocian actualmente con los otros partidos para sumar diputados a sus respectivos bloques.
El Likud, de Netanyahu, obtuvo 36 bancas. Con sus aliados, la derecha suma 58, es decir tres menos de los necesarios.
Enfrente, el partido «Azul-Blanco» de Gantz consiguió 33 bancas. Necesita el apoyo de la «Lista Unida» y sus 15 diputados.
El líder de esta fuerza, Aymán Odeh, indicó que podría apoyar a Gantz bajo ciertas condiciones.
– «Unidas» –
Aida Tuma, mujer árabe cristiana miembro de la «Lista Unida», forma parte del equipo de cuatro personas que negocia con Gantz.
Militante feminista antes de entrar en el parlamento en 2015, señala que las cuatro diputadas de su fuerza «provienen de todos los sectores y son representantes capaces y serias de toda la sociedad».
La «Lista Unida» está formada por varios partidos que representan a israelíes árabes tanto musulmanes como cristianos, así como israelíes judíos de izquierda. Sus miembros van del islamismo al comunismo.
Sundus Salih, de 34 años, será por su parte la diputada más joven de Israel. Oriunda de la ciudad Al Mashhad, cerca de Nazaret, está diplomada en Ciencias y Tecnología.
«Hay diferencias entre los partidos (que integran la lista). Pero nosotras cuatro, mujeres, nos unimos y estamos de acuerdo en la mayoría de las cosas», afirmó.
«Como madre y profesora, estoy preocupada por la proliferación de la violencia y las armas de fuego», agregó Salih.
La última pata de este cuarteto estuvo a punto de quedarse afuera de la Knéset. La candidatura de Hiba Yazbek, oriunda de Nazaret, fue bloqueada en un principio por el Comité Central Electoral a raíz de denuncias por supuesto apoyo al terrorismo en publicaciones en Facebook.
Yazbek rechazó esas acusaciones, apeló y ganó.
«Tenemos la intención de traducir nuestra gran fuerza electoral en posiciones políticas que refuercen nuestra posición de árabes en este país y se opongan a la derecha y su agenda», señaló a la AFP.