
La inflación en Argentina se acelera al 2,1 % mensual en septiembre
Natalia Kidd
Buenos Aires, 14 oct (EFE).- La inflación en Argentina fue en septiembre pasado del 2,1 %, la tasa de variación mensual más alta desde abril último, una aceleración en los precios que se explica por factores estacionales y, en menor medida, por el impacto de las tensiones cambiarias que se suceden desde agosto.
Según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el índice de precios al consumidor se situó en septiembre en el 31,8 % interanual, su decimoséptima desaceleración consecutiva y la tasa más baja desde julio de 2018.
En el noveno mes de 2025, los precios al consumidor crecieron el 2,1 % en comparación con agosto, mes en el que la tasa de variación mensual había sido del 1,9 %.
La inflación argentina acumuló en los nueve primeros meses del año un alza del 22 %, según el informe del Indec.
De acuerdo a los datos oficiales, los precios de los bienes tuvieron el mes pasado una variación positiva del 2 % en comparación con agosto, mientras que los servicios subieron el 2,3 %, unos datos que ascienden al 24,6 % y el 49,2 %, respectivamente, en la comparación interanual.
Entre las subidas mensuales registradas en septiembre destacan las de gastos de Vivienda (3,1 %), educación (3,1 %), transporte (3 %) e indumentaria (2,1 %), ésta última un alza ligada al cambio de temporada.
Los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron el 1,9 % con respecto a agosto, con fuertes aumentos en frutas y verduras que no son de esta estación.
«La aceleración se explicó por la suba de Estacionales (2,2 % mensual) después de la baja de agosto», apuntó la consultora LCG en un informe.
Volatilidad cambiaria
Más allá de las subidas por razones estacionales, hubo alzas de precios vinculadas a la elevada volatilidad del precio del dólar estadounidense en la plaza cambiaria argentina durante agosto y septiembre.
Este impacto se vio, por ejemplo, en el segmento de transporte, que incluye, entre otros, los precios de los vehículos, los combustibles y los pasajes aéreos, todos componentes muy ligados al tipo de cambio.
De todos modos, los expertos aseguran que el traslado a los precios de las variaciones en el tipo de cambio -un fenómeno denominado ‘pass through’- ha sido limitado debido al estancamiento del consumo y las importaciones de bienes a valores inferiores a los de producción local.
«En septiembre, el análisis sobre la evolución de la inflación estuvo atravesado por el salto del tipo de cambio y el eventual pass through. El dólar, en promedio, se movió 5,3 % por encima de agosto, pero el efecto de variación del tipo de cambio no se percibió al ciento por ciento, al igual que en julio y agosto», apuntó en un informe el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).
La volatilidad cambiaria se ha dado en el contexto de incertidumbre entre los inversores de cara a las elecciones legislativas de 26 de octubre en Argentina y las inconsistencias en el programa económico del presidente Javier Milei.
Argentina espera recibir una millonaria asistencia financiera por parte de los Estados Unidos que le permita robustecer su capacidad para hacer frente a las presiones cambiarias, pese a lo cual muchos inversores apuestan a que el esquema cambiario se modifique después de las elecciones, con una corrección en el tipo de cambio.
Según LCG, «aun con el auxilio financiero del Tesoro de los Estados Unidos, no termina de quedar en claro la forma que tomará el programa económico pasadas las elecciones».
Si hay cambios, en términos de inflación esto «podría significar mayor presión sobre precios al momento del desarme del esquema actual», observó la consultora.
Los más recientes pronósticos privados que recaba mensualmente el Banco Central argentino apuntan a que la inflación será este año del 29,8 %, desde un salto del 117,8 % en 2024.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) indicó este martes, en su informe de ‘Perspectivas económicas mundiales’,que espera que el índice de precios al consumidor acumule este año en Argentina un alza del 41,3 %, lo que implica una revisión al alza respecto al pronóstico del 35,9 % que publicó en abril pasado. EFE
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