The Swiss voice in the world since 1935

La prohibición del alcohol en Irak hace aguas

Carles Grau Sivera

Bagdad, 22 mar (EFE).- Al enterarse de la reciente entrada en vigor de una ley que prohíbe el alcohol en Irak, Danny al Mesij, un cristiano caldeo iraquí dueño de una licorería de Bagdad, temió perder su trabajo, pero le preocupó aún más el retroceso en las libertades y los derechos de las minorías religiosas en este país de mayoría musulmana.

“Prohibir el alcohol es algo imposible de aplicar. Nosotros somos cristianos y no está bien que vengan y cierren nuestras licorerías. Irak también es nuestro país”, asegura a EFE Danny, de 33 años, detrás del mostrador de la tienda que regenta en la céntrica calle capitalina Sadún, donde se concentran decenas de establecimientos que venden alcohol.

La tienda de Danny, al igual que el resto, sigue operando con relativa normalidad a pesar de que el pasado 20 de febrero una controvertida ley que estipula «la prohibición de importación, fabricación y venta de bebidas alcohólicas de todo tipo» fue publicada en el boletín oficial.

La norma fue aprobada en 2016 por el Parlamento, pero quedó en un limbo legal hasta ahora, tras la incansable presión de partidos musulmanes muy conservadores, entre los que se encuentran los brazos políticos de algunas milicias armadas proiraníes deseosas de convertir a Irak en otra república islámica.

Todavía no está claro cuándo van a actuar las autoridades para aplicar esta norma, cuya infracción implica penas de multa de hasta 25 millones de dinares iraquíes, es decir, alrededor de 19.000 dólares.

UN PROBLEMA PARA LAS MINORÍAS

Danny asegura que la mayoría de cristianos iraquíes, así como otras minorías étnicas como los yazidíes, trabajan en las tiendas de licores, por lo que su cierre supondría un gran problema para estas comunidades que ya sufren cierto grado de marginalización institucional.

“Si las cierran, ¿adónde vamos a ir, qué vamos a hacer? Es como si nos obligaran a abandonar nuestro propio país, y no pueden hacer eso”, asevera Danny, que está considerando marcharse al Kurdistán iraquí, región autónoma del norte de Irak donde no se aplicará la medida.

Según varios partidos políticos cristianos iraquíes, el eventual cierre de estos comercios podría suponer el desempleo de unas 200.000 personas, e incluso podría incrementar la tensión entre las diferentes comunidades religiosas de Irak.

De hecho, Sadam Husein ya intentó en 1994 prohibir el alcohol, algo que provocó también varias críticas al ir en contra del secularismo que promovía el régimen del dictador. Uno de los más críticos fue Uday, su propio hijo, que advirtió que la medida podría beneficiar al fundamentalismo religioso.

UNA LIBERTAD PERSONAL

Mohanid Abu Saif, de 58 años, ha comprado un par de botellas de whisky y de arak, un aguardiente de uva tradicional en varios países de Oriente Medio. Asegura que es un bebedor asiduo, aunque su religión, el islam, se lo impida.

“Soy musulmán, pero bebo para olvidar lo que está pasando en este país”, asegura visiblemente ofuscado por esta ley que “va contra el pueblo”, puesto que considera que consumir alcohol es “una libertad personal, pero en Irak ya no hay libertad”.

La entrada en vigor de la ley ha provocado que el flujo de alcohol en Irak haya disminuido considerablemente, principalmente por el miedo de los proveedores a enfrentarse a consecuencias legales.

Por ello, varios vendedores consultados por EFE apuntaron que el precio del producto se ha casi doblado, lo que ha obligado a los consumidores que antes compraban una botella de licor a comprar un cuarto, que mezclan con agua para alargar su duración.

Asimismo, aseguran que gran parte de los consumidores que acuden a las tiendas son musulmanes, que beben “para desahogarse” ante la desesperada situación de un país lacerado por décadas de guerra y aún en proceso de reconstrucción.

Además, la rampante corrupción de la clase gobernante supone un gran impedimento para el desarrollo del país, que a día de hoy es incapaz de suministrar electricidad continua a su población a pesar de ser el segundo mayor productor de petróleo de la OPEP.

“Si acaban prohibiendo el alcohol, saldremos a la calle a manifestarnos. En Irak, consideran que los que beben son infieles, pero en cambio robar y asesinar está permitido”, exclama Abu Saif. EFE

cgs/ijm/amr/pi

(foto)

© EFE 2023. Está expresamente prohibida la redistribución y la redifusión de todo o parte de los contenidos de los servicios de Efe, sin previo y expreso consentimiento de la Agencia EFE S.A.

Los preferidos del público

Los más discutidos

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR