La Universidad anula el título del alcalde de Estambul y bloquea su carrera presidencial

Estambul, 18 mar (EFE).- La universidad pública de Estambul, anuló este martes el título de licenciado del alcalde de esta ciudad, el socialdemócrata Ekrem Imamoglu, bloqueando de facto que pueda disputar la presidencia de Turquía al actual jefe del Estado, el islamista Recep Tayyip Erdogan.

Tener un diploma universitario es obligatorio para poder concurrir en las elecciones presidenciales, por lo que con esa decisión Imamoglu, una de las figuras más destacadas de la oposición turca, queda fuera de la carrera para las elecciones presidenciales previstas para 2028.

La Fiscalía de Estambul abrió en los últimos meses varias investigaciones contra Imamoglu, por ahora el único candidato designado del partido socialdemócrata CHP, el mayor de la oposición.

A finales de febrero se abrió contra él una investigación por supuesta «falsedad documental» en su licenciatura de Administración de Empresas, obtenida en 1994 en la Universidad de Estambul.

Este centro ha anunciado hoy que anula los títulos universitarios de 28 personas, entre ellas Imamoglu, que se inscribieron en 1990 en esta carrera mediante un traslado desde otras instituciones educativas.

Imamoglu estudió los dos primeros años de Empresariales en la Universidad Americana de Girne, una institución privada miembro de la Asociación Internacional de Universidades.

La Universidad de Estambul considera improcedente esa matrícula, por lo que anula el diploma obtenido cuatro años más tarde por «inexistente».

El líder del CHP, Özgur Özel, calificó hoy esta anulación de intento de bloqueo político, recordando que en 1990 la propia universidad ofertó ese traslado y que la solicitud de Imamoglu, al igual que la de otros muchos estudiantes, fue aceptada según las normas vigentes.

El partido nacionalista IYI, quinto del hemiciclo, también potestó contra la decisión de la universidad, denunciando que «va mucho más allá de la eliminación de un rival político» y supone una «mala nota» a los derechos y la democracia en el país, que asegura son «ya de por sí muy deficientes». EFE

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