Meloni afirma que la única manera de proteger Schengen es defender las fronteras europeas

Roma, 25 oct (EFE).- La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, afirmó hoy que ante el riesgo de que el tratado de Schengen, que estipula la libra circulación de ciudadanos europeos, «se haga añicos», lo único que se puede hacer es «trabajar en la defensa de las fronteras exteriores de la Unión Europea».

Meloni intervino hoy en el Senado para informar de la posición de Italia ante el Consejo europeo que comenzará mañana, en el que se abordará sobre todo el conflicto en Israel, después de que su Gobierno decidiese suspender Schengen y restablecer los controles en la frontera con Eslovenia, al considerar que podrían entrar terroristas a través de las ruta migratoria de los Balcanes.

En su intervención, Meloni expresó su preocupación por los llamados «lobos solitarios, que matan a inocentes en nombre de Dios» y por tanto, explicó, hay que «levantar la guardia» en cuestiones de seguridad.

Y defendió que puede haber un vínculo entre terrorismo e inmigración irregular, y que «se han equivocado quienes hasta ahora, por reflejo ideológico, han descartado con complacencia este posible vínculo».

De ahí la decisión de los controles con Eslovenia y a este propósito afirmó que «algunos destacados políticos europeos, que han comentado esta circunstancia, han advertido del riesgo de que, si seguimos por este camino, Schengen se haga añicos y con él uno de los pilares de la integración europea: la libertad de circulación».

«Es un riesgo evidente y una preocupación que compartimos. Pero, más aún, la única manera de evitar esta deriva es trabajar en la defensa de las fronteras exteriores de la Unión. Trabajar sobre los movimientos primarios es la condición necesaria para controlar los movimientos secundarios», aseveró.

Según Meloni, en los últimos consejos europeos se ha cambiado la perspectiva sobre la migración «y ya no se tiende a descargar el peso de esta enorme responsabilidad sobre los Estados de primera llegada como Italia» y «se reconoce plenamente que la única respuesta posible pasa por la defensa de las fronteras exteriores».

«No más puertas abiertas y redistribución, sino protección de las fronteras exteriores, lucha sin cuartel contra el tráfico de seres humanos, acuerdos con terceros países, vías legales para los refugiados y cuotas de inmigrantes legales compatibles con las necesidades de nuestro sistema económico», subrayó.

Según explicó el ministro del Interior italiano, Matteo Piantedosi, los controles en la frontera con Eslovenia podrían durar todo el invierno. EFE

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