
Netumbo Nandi-Ndaitwah toma posesión como la primera mujer presidenta de Namibia
Johannesburgo, 21 mar (EFE).- Netumbo Nandi-Ndaitwah fue investida este viernes como presidenta de Namibia, convirtiéndose en la primera mujer en presidir el país, tras ganar las elecciones del pasado noviembre, en una ceremonia que tuvo lugar el mismo día que se conmemora el 35 aniversario de la independencia del país.
Nandi-Ndaitwah hizo historia como la primera presidenta electa de la historia de Namibia, y pasa a ser sólo la segunda mujer que actualmente ocupa una jefatura de Estado en África, un continente donde las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en todos los niveles de la toma de decisiones.
La nueva mandataria, a quien han antecedido en la Presidencia cuatros hombres desde la independencia de Namibia, expresó durante la ceremonia de investidura su deseo de inspirar a las mujeres a «levantarse y asumir responsabilidades» en todos los ámbitos de la vida, «no por su género, sino por su capacidad y competencia como miembros valiosos de la sociedad».
Conocida coloquialmente como NNN, se impuso en los comicios del pasado 27 de noviembre con el 57,31 % de los votos, logrando superar el creciente desencanto social hacia su partido, la Organización Popular del Sudoeste de África (SWAPO), que ha mantenido el poder desde la independencia del país de Sudáfrica en 1990.
«El desafío que enfrento (…) es preservar los logros de nuestra independencia en todos los frentes y asegurar que la agenda inconclusa de avance económico y social de nuestro pueblo se lleve adelante con vigor y determinación para lograr una prosperidad equitativa y compartida para todos», dijo Nandi-Ndaitwah durante su discurso en la capital, Windhoek.
“Hoy celebramos un día monumental en la historia de nuestra República. Es el día en el que conmemoramos nuestro 35 aniversario de la independencia y también es el día en el que seremos testigos de cómo una de las hijas más destacadas de Namibia rompe el techo de cristal”, declaró, por su parte, el ya expresidente de Namibia Nangolo Mbumba, a quien sucede la mandataria.
Nueve jefes de Estado en la investidura
El acto tuvo lugar en la State House, sede de la Presidencia, y no en el Estadio de la Independencia, donde estaba prevista una gran ceremonia que fue cancelada a última hora debido a las intensas lluvias torrenciales que en los últimos días han azotado la capital.
La ceremonia contó con la asistencia de al menos nueve jefes de Estado y de Gobierno africanos, tres vicepresidentes y dos primeros ministros, además de exmandatarios y delegaciones de diferentes países.
Algunos de los líderes presentes fueron la presidenta de Tanzania, Samia Suluhu Hassan, invitada de honor en la investidura; el presidente de Kenia, William Ruto; el de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa; el de Angola, João Lourenço; el de Zambia, Hakainde Hichilema; el de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi; el de Botsuana, Duma Boko, y el de Mozambique, Daniel Chapo.
“Su contundente victoria es motivo de orgullo para el continente, y aún más para el pueblo de Tanzania, que fue su hogar durante gran parte de sus años de formación”, dijo Hassan durante su participación en el acto.
“Hemos sido testigos de su incansable dedicación al bienestar de todos los namibios y de su compromiso con la paz, la estabilidad y la prosperidad de esta gran nación”, agregó.
También asistieron el secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática, Brahim Gali; los vicepresidentes de Uganda, Edward Kiwanuka; Ghana, Mahamudu Bawumia; y Malaui, Michael Usi; así como el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, entre otros.
Asimismo, acudieron a la ceremonia Ellen Johnson-Sirleaf, expresidenta de Liberia (2006-2018), que hizo historia como la primera mujer elegida para ocupar este cargo en África; y Joyce Banda, presidenta de Malaui de 2012 a 2014, reconocida en su momento por la revista Forbes como la mujer más poderosa del continente.
Retos de Nandi-Ndaitwah
La hasta ahora vicepresidenta e histórica militante por la independencia de Namibia, tendrá que enfrentar el creciente descontento de la población de este país desértico y rico en minerales como uranio y diamantes, y revertir la desilusión popular por las promesas incumplidas del SWAPO.
Después de más de tres décadas de gobierno, el partido no ha hecho más que perder apoyo durante los últimos años: del 80 % de los votos en las elecciones legislativas de 2014 al 65,5 % en 2019, cuando perdió por primera vez la mayoría de dos tercios en la Asamblea Nacional (Cámara baja del Parlamento). EFE
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