Pezeshkian acepta cambiar el próximo presupuesto por ser insuficiente ante la inflación
Teherán, 30 dic (EFE).- El presidente iraní, Masud Pezeshkian, aceptó este martes modificar el proyecto de presupuesto para el próximo año iraní, que comienza en marzo, después de que una comisión parlamentaria lo rechazara por considerar insuficiente la subida salarial del 20 % frente a la alta inflación que afecta a la población.
En una carta enviada al Parlamento, Pezeshkian expresó su acuerdo con “las reformas que conduzcan a un aumento de los salarios y beneficios de los empleados del gobierno y de los jubilados”.
En el proyecto original, el gobierno había propuesto un incremento del 20 % en los salarios y beneficios, cifra que los legisladores consideraron insuficiente frente a una inflación estimada entre el 40 % y 45 %.
Además del aumento salarial, Pezeshkian aprobó modificaciones en la tasa de exención fiscal para personas físicas y jurídicas, así como un incremento en los subsidios destinados a la provisión del bono de alimentos y al fortalecimiento del sustento de la población, como exigió ayer la Comisión de Consolidación Presupuestaria del Parlamento.
Esa comisión rechazó el lunes el proyecto de presupuesto presentado por el gobierno iraní la semana pasada.
Mojtaba Yousefi, portavoz de la Comisión de Consolidación, explicó que los principales motivos para el rechazo del proyecto fueron la disminución del poder adquisitivo de los trabajadores y el temor a los efectos inflacionarios del aumento del impuesto al valor agregado (IVA), de 10 % a 12 %, entre otras cosas.
“Dado que el gobierno no cuenta con recursos suficientes para aumentar los salarios acorde a la inflación, creemos que un incremento del 30 % al 35 % es una cifra justa”, indicó Yousefi.
Con las modificaciones aceptadas por Pezeshkian, el Parlamento busca garantizar que el presupuesto esté más alineado con las necesidades de la población y las exigencias económicas del país.
La economía iraní, golpeada por las sanciones de Estados Unidos y de la ONU por su programa nuclear, registró una inflación anual del 42,2 % entre noviembre y diciembre, según el Centro de Estadísticas de Irán, mientras que la inflación punto a punto ha superado el 52 % en comparación con el mismo período del año pasado.
Además, Irán experimentó una contracción económica de entre 0,6 % y 0,8 % durante la primera mitad del año iraní —entre el 21 de marzo y el 21 de agosto—, según datos recientes del Banco Central del país, mientras que el rial se ha devaluado un 69 % frente al dólar durante 2025.
Esta situación ha detonado protestas en Teherán y otras ciudades, protagonizadas inicialmente por los comerciantes de la capital iraní, quienes realizaron una huelga parcial el domingo y el lunes, exigiendo medidas para evitar las fluctuaciones monetarias que afectan a sus negocios y la importación de productos extranjeros. EFE
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