Somalia prefiere ignorar comentarios de Trump a «convertir sus palabras en un problema»
Nairobi, 3 dic (EFE).- El primer ministro de Somalia, Hamza Abdi Barre, afirmó que es mejor “ignorarlas que convertir sus palabras en un problema”, en referencia a los comentarios del presidente estadounidense, Donald Trump, quien dijo que el país africano “apesta” y que sus habitantes solo “andan matándose entre ellos”.
“Trump ha insultado a muchos países, incluyendo Nigeria y Sudáfrica. Hay cosas que no requieren comentario; simplemente las dejamos pasar. Es mejor ignorarlas que convertir sus palabras en un problema”, dijo Barre durante un furo de innovación tecnológica en Mogadiscio, capital de Somalia, según reportaron medios locales este miércoles.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Ali Omar, indicó que la narrativa del presidente norteamericano “es falsa” y un “insulto” a la resiliencia y sacrificio somalí, además de llamar a la unidad en defensa de la dignidad nacional.
“Esta narrativa no solo es falsa, sino que es un insulto a nuestra resiliencia y sacrificio. Debemos mantenernos unidos, proteger nuestra dignidad y demostrarle al mundo que no somos peones de nadie”, expresó el ministro de Exteriores en sus redes sociales.
“Para algunos, se ha vuelto demasiado fácil usar a Somalia como chivo expiatorio o como una forma de distraer la atención de sus propios fracasos”, agregó.
Esta ‘tertulia’ empezó el martes, cuando Trump acusó a los inmigrantes somalíes de aprovecharse de los Estados Unidos durante una reunión de gabinete.
“No son gente que trabaje, gente que diga, vamos a hacer grande este lugar. No hacen más que quejarse (…) no los queremos en nuestro país. Que vuelvan al lugar de donde llegaron”, dijo Trump.
Somalia, según Trump, «apenas es un país» y «no tienen nada. Solo andan matándose entre ellos. No hay estructura», recalcó en un ataque que incluyó a la congresista Ilhan Omar, de origen somalí y representante del Estado de Minnesota, que registra el mayor porcentaje de somalíes en EE.UU.
El fin de semana pasado, Trump cargó contra los inmigrantes de 19 países considerados ‘del tercer mundo’, incluido Somalia, e impuso sobre ellos una suspensión de decisiones en casos de asilo.
Una medida creciente en la represión migratoria de EE.UU. y tras incidentes recientes de seguridad nacional, que incluyen el tiroteo a dos miembros de la Guardia Nacional en Washington, atribuido a un ciudadano afgano con asilo.
Somalia, con ayuda de EE.UU., ha intensificado las operaciones militares contra el yihadismo de Al Shabab -grupo afiliado desde 2012 a la red terrorista de Al Qaeda- o contra su rival, la filial del Estado Islámico (EI) en el país desde que el presidente del país, Hassan Sheikh Mohamud, anunció en agosto de 2022 una «guerra total» contra los terroristas.
El Ejército somalí, con soporte de sucesivas misiones de la Unión Africana (UA), ha efectuado múltiples ofensivas contra el grupo terrorista, y a veces con la colaboración militar de EE.UU. y Turquía en bombardeos aéreos.
Sin embargo, la cadena estadounidense NBC aseguró en febrero pasado que el Gobierno de Trump estaba estudiando una orden ejecutiva para desmantelar el Mando Militar de Estados Unidos en África (AFRICOM) y transferirlo al comando europeo (EUCOM).
Según el canal, que citaba entonces fuentes familiarizadas con esos planes, el cierre de AFRICOM forma parte del objetivo de Trump de reducir el tamaño del Pentágono, eliminar burocracia y retirar tropas estadounidenses de ciertas zonas de África. EFE
aam/ajs