
La CPI pone fin a su investigación sobre crímenes de lesa humanidad en Kenia
La Haya, 27 nov (EFE).- La fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) anunció este lunes que suspende su investigación sobre posibles crímenes de lesa humanidad cometidos en Kenia durante la violencia registrada después de los comicios presidenciales en 2007 y 2008.
Se ha decidido “concluir la fase de investigación” sobre Kenia, después de «evaluar toda la información disponible en este momento», puesto que la búsqueda de pesquisas iniciada en 2010 dio lugar a cargos contra seis sospechosos en dos casos distintos, aunque todos fueron retirados, anulados o ni siquiera confirmados oficialmente, explicó la fiscalía.
Entre esos acusados, se encuentran el presidente Uhuru Kenyatta, y el vicepresidente, William Ruto, una decisión de la CPI que llevó a Kenia a anunciar que abandona el Estatuto de Roma, el tratado fundacional de este tribunal.
La investigación sobre presuntos crímenes de lesa humanidad en el contexto de la violencia postelectoral en Kenia en 2007 y 2008 dio lugar a órdenes de arresto contra tres sospechosos: Paul Gicheru, Walter Barasa y Philip Kipkoech Bett, pero Gicheru ha fallecido recientemente, y los otros sospechosos continúan prófugos.
“He llegado a esta decisión después de considerar los hechos y circunstancias específicos de esta situación. En consecuencia, la oficina (del fiscal) no perseguirá casos adicionales sobre la presunta responsabilidad penal de otras personas, pero mantiene su capacidad para actuar sobre la información relativa a represalias contra testigos”, señaló Nazhat Shameem Khan, fiscal adjunta de la CPI.
En este sentido, agregó la fiscal, los casos contra Barasa y Bett por “delitos contra la administración de justicia” continúan ante el tribunal.
La oficina del fiscal informó de su decisión a las autoridades kenianas, a quienes se prometió “mejorar la cooperación e identificar sinergias comunes” en el próximo periodo.
La Fiscalía estimaba que los altercados violentos se saldaron con más de un millar de muertes y más de 600.000 personas se vieron obligadas a abandonar sus hogares.
Entre la acusaciones estaban los delitos de asesinato, de traslado forzoso de civiles y de persecución en el Valle del Rift durante los sucesos violentos postelectorales que tuvieron lugar en Kenia en 2007 y 2008. EFE
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