
La misión de la ONU en la RD Congo cesa sus operaciones en la provincia de Kivu del Sur
Kinsasa, 30 abr (EFE).- La Misión de Estabilización de la ONU en la República Democrática del Congo (Monusco) cesó este martes sus operaciones en la provincia de Kivu del Sur (este), en el marco de la retirada de los cascos azules del país prevista para este año, informó Naciones Unidas. A petición del Gobierno congoleño, el Consejo de Seguridad de la ONU decidió el pasado diciembre retirar la Monusco de Kivu del Sur antes de finales de abril, por lo que ahora el mandato de la misión se limita a las provincias de Kivu del Norte e Ituri, ambas en el este. Solo el personal necesario para garantizar la seguridad de los trabajadores, las instalaciones, los convoyes y los equipos de la ONU permanecerán en la provincia hasta la retirada completa, explicó la organización en un comunicado. La representante especial del secretario general de la ONU y jefa de la Monusco, Bintou Keita, recordó que la seguridad y la protección de la población en Kivu del Sur recae ahora en las Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo (FARDC), que asumirán mayor responsabilidad a medida que continúe la retirada de la Monusco. Según el plan, en paralelo a la retirada, el Gobierno congoleño está reforzando su presencia en las zonas que la Monusco abandona. En este contexto, la misión de la ONU apoyó la intención del Gobierno de desplegar «consejos locales de seguridad» para promover «la acción preventiva y la búsqueda de soluciones duraderas» frente a la inseguridad. Durante su retirada, la Monusco ha transferido dos bases militares a las autoridades nacionales. De las siete restantes, cinco serán transferidas a las FARDC entre mayo y junio de 2024, y dos se cerrarán en mayo. Además, otras quince instalaciones serán también transferidas o cerradas antes de finales de junio, aseguró la ONU. Los primeros cascos azules se desplegaron en 2003 como parte de la Monuc, nombre original de la misión. Desde entonces, más de 100.000 soldados han prestado servicio en la provincia de Kivu del Sur. A ellos y a sus países dio las gracias Keita, quien afirmó que su «compromiso, experiencia y recursos» han supuesto una «contribución inestimable en la consolidación de la paz y la seguridad» de la provincia de la RDC. Durante las últimas dos décadas, unos 16.300 uniformados desplegados por las fuerzas de la ONU han protegido a los civiles realizando operaciones y patrullas regulares, apoyando diálogos comunitarios e iniciativas de participación. Las protestas populares contra la misión de la ONU se intensificaron en 2022 en el este del país, donde la Monusco está desplegada para respaldar la lucha del Ejército congoleño contra más de un centenar de milicias. Pero la población le acusa de no hacer suficiente y, en las protestas desatadas en junio de 2022, manifestantes asaltaron y saquearon las instalaciones de la ONU en varias localidades, lo que dejó al menos 33 muertos, incluidos civiles y cuatro cascos azules, según cifras oficiales. La ONU recordó que la retirada de Kivu del Sur de la Monusco, una de las misiones más antiguas de la ONU, «no es sinónimo de salida de las Naciones Unidas de la RDC». «Tras la salida de la Monusco, las agencias, fondos y programas de la ONU seguirán prestando su apoyo», explicó. EFE py-mol/fpa