
La misión de la ONU en Libia alerta de la «fragilidad» de la tregua en Trípoli
Trípoli, 24 jun (EFE).- La enviada de la ONU en Libia, Hanna Tetteh, alertó este martes por videoconferencia ante el Consejo de Seguridad de la «fragilidad de la tregua» en Trípoli que puso fin a los enfrentamientos armados de mayo y pidió a los «actores abstenerse de acciones provocativas».
«La tregua sigue siendo frágil y la situación de seguridad es impredecible», declaró hoy en su exposición y advirtió de las informaciones que apuntan a movilizaciones armadas en terreno y transferencia de armamento en zonas residenciales.
Según pudo comprobar EFE, la capital libia presencia desde anoche movimientos de grupos y vehículos armados y un mayor despliegue de las fuerzas del Gobierno de Unidad Nacional (GUN).
Tetteh además remarcó la «gran preocupación» que existe por la implicación de actores de la parte este del país magrebí, controlada por el poderoso mariscal Jalifa Haftar, que socave el alto el fuego de 2020 que puso fin a la guerra civil entre la parte occidental y oriental del país divido desde 2014.
El primer ministro del GUN, Abdelhamid Dbeiba, con sede en Trípoli, anunció tras los enfrentamientos de mayo una restructuración de las fuerzas de seguridad y urgió a la integración de las milicias bajo control estatal.
El Consejo presidencial, Mohamed Menfi, nombró recientemente a Hassan Bouzreiba como sucesor del líder del Aparato de Apoyo a la Estabilidad (SSA) Abdel Ghani al Kikli, que fue asesinado en una operación el 12 de mayo, lo que desencadenó el mayor enfrentamiento entre grupos armados de los últimos años.
El movimiento de Souk Juma, distrito de la capital que fue especialmente activo en las manifestaciones contra el GUN por los choques armados, aseguró en un comunicado que trabajarán por evitar la vuelta de episodios de violencia.
Para Abdelhakim, ciudadano libio, «lo importante es preservar la frágil estabilidad y apoyarla para que se convierta en una realidad y no ir detrás de cualquier enfrentamiento que amenace a los civiles, porque son los únicos perdedores», declaró a EFE.
Las luchas de poder entre milicias en el oeste de Libia derivan a menudo en enfrentamientos que han costado la vida de civiles y suponen un alto riesgo para débil la estabilidad del país mediterráneo que no ha conseguido completar un proceso de transición desde el derrocamiento y asesinato de Muamar Gadafi en 2011. EFE
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