La policía francesa reabre la carretera entre Nouméa y el aeropuerto

(Actualiza con nuevos datos y declaraciones)

París, 20 may (EFE).- La policía francesa ha reabierto este lunes la carretera entre la capital de Nueva Caledonia, Nouméa, y el aeropuerto, tras una operación «importante» en la que se han desmantelado 76 barricadas.

La operación requirió el despliegue de agentes antidisturbios apoyados por vehículos blindados y de maquinaria pesada de construcción para retirar los materiales y los vehículos incendiados.

Las autoridades van a seguir patrullando la zona para evitar que las barricadas «sean reconstruidas», anunció en rueda de prensa el alto comisario del Gobierno en ese territorio autónomo, Louis Le Blanc.

El control de los 46 kilómetros de carretera que unen Nouméa con el aeropuerto internacional de La Tontouta, en la isla Grande Terre, la única de tamaño del territorio, se ha convertido en una cuestión clave para las autoridades.

Le Franc anunció también que los grupos especiales de la Gendarmería (GIGN) van a realizar operaciones de hostigamiento contra los grupos independentistas que construyen barricadas y atacan comercios e infraestructuras.

El alto comisariado anunció que se mantienen el toque de queda a las 18.00 hora local, así como la prohibición de las grandes reuniones, el transporte de armas y la venta de bebidas alcohólicas.

Desde que comenzaron los disturbios hace una semana, ha habido seis muertos (dos de ellos, gendarmes) y hay al menos 240 detenciones.

«La prioridad es restablecer el orden legal», aseguró al canal BFMTV la portavoz del Ministerio del Interior, Camille Chaize.

El Gobierno envió la semana pasada un refuerzo de mil policías y gendarmes que se unieron a los 1.700 agentes ya destinados en el territorio.

Los presidentes de tres otros territorios franceses de ultramar (Reunión, Martinica y Guayana), han firmado una petición, junto con 16 diputados y senadores y un diputado europeo de esas circunscripciones, para solicitar al Gobierno de París la «retirada inmediata» del proyecto de reforma del censo de Nueva Caledonia, origen de los disturbios.

A pesar de que ahora «hay una relativa calma» podría haber «nuevos brotes» de violencia con un posible «efecto contagio» en otros territorios de ultramar, advirtió hoy a la radio pública Grabriel Serville, presidente de la colectividad de Guayana.

Hoy también llegaron a Francia los féretros de los dos gendarmes muertos la pasada semana en Nueva Caledonia, uno de 22 años que recibió un disparo en la cabeza y otro de 45 fallecido después de que a un compañero se le disparara el arma de manera accidental.

Por otra parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, encabezará hoy una nueva reunión del consejo de seguridad y defensa nacional consagrada a esta crisis, y que comenzará a las 18.30 hora local (16.30 GMT).

Se trata de la tercera reunión de este tipo que Macron convoca desde el estallido de la crisis. El primero fue el pasado miércoles para imponer el estado de emergencia y el segundo un día después.

El estado de emergencia tiene duración de doce días y una eventual prolongación debe recibir el visto bueno de las dos cámaras del Parlamento.

La alcaldesa de Nouméa, la macronista Sonia Lagarde, expresó este lunes a la radio pública su «temor a que el presidente se vea obligado a prologar» el estado de emergencia.

La principal aerolínea con vuelos internacionales en el territorio, Aircalin, anunció hoy que no reanudará sus operaciones al menos hasta el próximo jueves debido a la continuación del cierre del aeropuerto a las actividades civiles.

Y la Universidad de Nueva Caledonia informó por su parte de que su campus de Nouméa permanecerá cerrado de forma indefinida. EFE

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