
Los aspirantes a liderar Japón se muestran recelosos a un adelanto de elecciones generales
Tokio, 3 oct (EFE).- Los aspirantes a liderar el gobernante Partido Liberal Democrático (PLD) de Japón, y por lo tanto a posiblemente convertirse en el nuevo primer ministro del país, se muestran recelosos sobre la posibilidad de convocar elecciones anticipadas poco después de asumir el cargo.
Cinco candidatos concurren a las primarias de este sábado del PLD, para las que se prevé que pueda ser necesaria una segunda vuelta entre los dos más votados, con la contienda ajustada entre tres: el ministro de Agricultura, Shinjiro Koizumi; la exministra de Interior y Seguridad Económica Sanae Takaichi, y el portavoz gubernamental Yoshimasa Hayashi.
Durante la campaña hasta este viernes, los aspirantes han insinuado su deseo de no adelantar generales para centrarse en abordar temas como el aumento de los costes del vida.
«Lo que la ciudadanía desea es que se tomen acciones rápidas para abordar los altos precios y otros problemas, por lo que no pienso disolver inmediatamente la Cámara de Representantes», dijo Koizumi, que a sus 44 años aspira a ser el líder japonés más joven de posguerra, según la agencia Kyodo.
Takaichi (64), la única mujer en la contienda del PLD y aspirante a primera mandataria de Japón, que lidera con Kozumi los sondeos, también ha descartado una disolución temprana de la Cámara Baja ante los «crecientes desafíos», mientras que Hayashi (64) ha afirmado que priorizará «la implementación de políticas necesarias para la población».
Convocar elecciones poco después de asumir el cargo ha sido una herramienta habitual en la política japonesa reciente, dado que puede permitir al nuevo primer ministro aprovechar el aumento de votos que suele experimentar un nuevo Gobierno, pero en esta ocasión conllevaría riesgos ante la caída del apoyo al PLD.
Durante el poco más de un año de Gobierno del primer ministro Shigeru Ishiba, el PLD ha perdido la mayoría de la que gozaba en ambas cámaras parlamentarias junto a su socio de coalición, Komeito, unos resultados que motivaron la dimisión del mandatario.
Los miembros del PLD temen que la ciudadanía no apoye al partido en esta ocasión en unas elecciones anticipadas si consideran que su convocatoria está destinada a servir a los intereses del partido, y no a los de la ciudadanía, preocupada por la inflación, la sostenibilidad de la seguridad social y las pensiones por el envejecimiento demográfico y la inmigración.
«Sería extremadamente arriesgado y potencialmente desastroso para el nuevo primer ministro convocar rápidamente elecciones generales», dice a EFE Jeffrey J. Hall, especialista en estudios japoneses en la Universidad de Estudios Internacionales de Kanda, que cree que «el mero hecho de cambiar la cara del partido no resolverá los problemas básicos que hacen que el PLD sea tan impopular entre los votantes».
El académico ve improbable que se convoquen generales pronto. «Sin un cambio importante que impulse las cifras del PLD en las encuestas, unas elecciones generales probablemente resultarían en el PLD perdiendo incluso más escaños», señala.
Los contendientes compiten por 590 votos, repartidos en principio mitad y mitad entre los parlamentarios del partido y sus bases.
El ganador de las primarias del PLD se anunciará el mismo sábado, lo que lo convertirá virtualmente en el nuevo primer ministro del país asiático, a falta de que sea confirmado por el Parlamento, algo que según adelantan los medios podría suceder el día 14.
Se prevé con casi toda probabilidad que el nuevo líder del PLD, la fuerza más votada en las últimas generales de 2024, se convierta en el jefe del Ejecutivo según las leyes nacionales, ante la falta de acuerdo entre la oposición para proponer una alternativa viable. EFE
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