Nuevo brote de la ‘fiebre de Texas’

Es como se denomina comúnmente en Estados Unidos la anaplasmosis, una enfermedad detectada esta semana en Suiza.

Erradicada en los años 40, la dolencia vuelve a brotar en EEUU debido al aumento de los intercambios comerciales con México.

Los primeros casos de ‘fiebre de Texas’ en Norteamérica se registraron en los estados de Virginia y Missouri allá por el 1810.

La dolencia que provoca anemia en el ganado tiene orígenes remotos. En el transcurso de los siglos se han detectado casos de anaplasmosis a lo largo del mundo.

Francia, Italia, Rumanía y España, por ejemplo, han vivido brotes en diferentes periodos de su historia.

Conquista del Nuevo Mundo

Al percatarse del problema, los científicos estadounidenses lograron establecer que la enfermedad provenía del ganado traído por los conquistadores españoles al Nuevo Mundo e importado a Texas desde las Antillas y México.

En el siglo XIX, los vaqueros tejanos llevaban el ganado hacia el Medio-Oeste. Desde allí los animales partían en convoyes ferroviarios con rumbo a las grandes ciudades del norte, oeste y este del país.

De esa forma, la enfermedad se extendió a través de Estados Unidos, lo que llevó a varios estados a adoptar medidas para contener su propagación.

A partir de 1861, los estados de Missouri y Kansas prohibieron el tránsito de ganado tejano por su territorio respectivo.

La intervención de Washington se produjo cuando Gran Bretaña y Alemania amenazaron con cesar las importaciones de bovino estadounidense.

En 1895, Estados Unidos decretó la puesta en cuarentena del ganado infectado creando una línea de demarcación entre el sur y el norte.

Paralelamente, dos científicos del Departamento de Agricultura identificaron el vector de la enfermedad, un microorganismo que destruye los glóbulos rojos en la sangre de los animales contagiados.

Pista mexicana

Asimismo descubrieron que la dolencia se transmitía por la picadura de la garrapata.

Fue así que se lanzó un vasto programa de desinfección, que consistía en fumigar con pesticidas cada animal con riesgo de contraer la plaga.

En 1943, Estados Unidos logró erradicar la anaplasmosis en todo su territorio, pero desde mediados de los años 90, la epizootia vuelve a brotar en el estado de Texas.

Los veterinarios creen que se debe al aumento de los intercambios comerciales, tras la entrada en vigor del Acuerdo de Libre Comercio entre Estados Unidos, Canadá y México (TLC).

El TLC ha intensificado las relaciones entre los ganaderos de Tejas y México, un país donde los casos de anaplasmosis son frecuentes.

Para contener su propagación, Texas ha establecido una zona-tampón a lo largo de su frontera con México. Y un equipo de la Universidad de Texas A & M trabaja en la elaboración de una vacuna con miras a erradicar definitivamente la enfermedad.

Marie-Christine Bonzom, Washington