Armin Ritz: “Hay que ir a ver a la colectividad”
Mientras estuvo al frente de la Embajada en Buenos Aires, Armin Ritz mantuvo estrecha relación con los suizo-argentinos y recorrió el país compartiendo con la comunidad helvética alegrías y momentos difíciles.
Los problemas de la comunidad a causa de la crisis, las “famosas cuentas”de Menem y el futuro Embajador, también fueron temas tratados.
¿Cómo ha sido su trato con la comunidad suiza-argentina?
Ha sido muy lindo compartir las fiestas en cada provincia con la comunidad, con un trato tan amistoso. Ellos trabajan para nuestra imagen en la Argentina, y lo hacen con sus propios recursos, algo que además es beneficioso para la Embajada y para Suiza.
La crisis también afectó a la comunidad suiza…
La afectó y un gran tema a partir de enero de 2002 fue el del Seguro Social de Vejez (AVS), que en pesos la contribución se triplicó a raíz de la devaluación, y ese era un tema que no se podía solucionar por el tratamiento igualitario a los suizos de todo el mundo.
Pero lo que se podía hacer era ayudar, y muchas veces hubo dinero del gobierno suizo y de otras donaciones privadas.
Otro tema que para mi fue muy difícil, fue el cierre del Hogar Suizo para Ancianos. Lamentablemente el hogar tenía una situación imposible de salvar, aún con todo el esfuerzo que se hizo, porque faltaban los internos, que apenas eran una minoría de suizos. Eso es algo que todavía me duele mucho…
¿Cuándo sucedió lo del corralito, cómo lo explicaba en Suiza? ¿Entendían lo que era el “corralito”?
Sí y no. Hay que distinguir: los expertos financieros sí lo entendían, y recuerdo que durante los primeros meses yo defendía la convertibilidad, y muchos expertos suizos me decían “eso no va a funcionar, va a ocasionar un colapso un día en el sistema financiero”. Entonces para ellos no era una sorpresa.
Claro que para el suizo normal en cierto sentido hasta ha sido un shock, porque los suizos durante mucho tiempo no han perdido sus ahorros.
¿Cómo está el tema de las supuestas cuentas de Menem en Suiza?
El tema de las famosas cuentas es otro punto para ver. Yo repito siempre que no es un tema que me ocupe, porque no es un tema de diplomacia ya que hay dinero sucio o no lo hay, y eso sólo debe ser determinado por la Justicia.
No me ha ocupado pero me ha preocupado, por dos razones: las primera es que acá uno tiene la impresión de que los argentinos piensan que todo el dinero está en Suiza, y eso es equivocado porque está sólo el 15% aproximadamente.
El segundo motivo por el que me preocupó es porque nosotros tenemos la firme intención de devolver dinero ilegal, según el criterio de la doble imponibilidad, y para acelerar todo este proceso se necesita un contacto regular entre los fiscales y los jueces.
Creo que vamos a firmar el acuerdo de cooperación judicial y estoy seguro que ahí vamos a tener el marco para tener con la justicia argentina un diálogo constante sobre este tema. Porque el crimen hoy es globalizado y por eso se necesitan contactos regulares entre los diversos grupos de justicia.
El acuerdo se iba a firmar el 26 de agosto…
No se pudo firmar por el tema del cambio de ministro de Justicia en Argentina. El nuevo ministro, Horacio Rosatti, me pidió postergar la firma y pedir a Berna nuevas fechas en octubre, algo muy comprensible porque debe ponerse en tema. Y si se concreta en octubre, creo que va a estar muy bien.
¿Cree que esta postergación es una involución?
Para mi no ha cambiado nada. Es solamente un problema de agenda del Ministro y me alegró que me proponga una fecha relativamente cercana para llevarlo adelante.
¿Qué mensaje le daría a Daniel Von Muralt, su sucesor a partir de noviembre? ¿Qué consejos le daría?
No es costumbre ni es necesario dar consejo a un sucesor. Mi sucesor no sólo es un querido amigo sino también un gran profesional, así que él sabrá cómo hacer.
Pero retrospectivamente, debo reconocer que hay que ir a ver a la colectividad, no sólo en Buenos Aires, sino también afuera, porque lleva a muchos contactos con argentinos. Eso para mi ha sido un instrumento de trabajo.
También creo que acá un Embajador suizo tiene las puertas abiertas en todos los ministerios y a mi me dio mucho aporte ir a conferencias con ministros y expertos, donde uno se encuentra con gente muy interesante.
Acá hay una vida intelectual muy viva y nunca hay que olvidar los contactos con los intelectuales. Porque este es un país que no es fácilmente comprensible para un suizo, y es interesante entonces diversificar las fuentes de información.
¿Se ha reunido con el presidente Néstor Kirchner?
He visto al Presidente en tres o cuatro ocasiones, pero nunca en entrevista privada. Pero cada vez que lo vi pude hablar con él, le reiteré la invitación a visitar Suiza y siempre me contestó con una gran sonrisa. Creo que está muy interesado en mi país.
La visita que iba a hacer a Suiza fue postergada y también se debió cancelar una visita del presidente suizo el año pasado por problemas de agenda, y creo que esa va a ser una tarea para mi sucesor.
Nosotros queremos al presidente Kirchner en Suiza y por eso también le deseamos que le vaya bien para poder visitar mi país con un ánimo distendido. Que vaya a Interlaken, que es la tierra de sus ancestros.
swissinfo, Norma Domínguez, Buenos Aires
Armin Ritz hace un detnido balance de sus gestiones diplomáticas en Argentina antes de viajar a su nuevo destino, en España.
“Hay una vida intelectual muy viva y nunca hay que olvidar los contactos con los intelectuales. Este es un país que no es fácilmente comprensible para un suizo, y es interesante entonces diversificar las fuentes de información”. (Armin Ritz)
En cumplimiento de los estándares JTI
Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI
Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.
Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.