Biógrafo de Carlos III destaca que es un rey «feliz» que dejó atrás a príncipe «frustrado»
Londres, 4 dic (EFE).- El biógrafo de Carlos III Robert Hardman destacó este jueves que el monarca británico es un rey «feliz» y «sonriente» que dejó atrás a un príncipe «frustrado», y que incluso al revelar hace casi dos años que tenía cáncer pudo vérsele «cómodo» con el hecho de que el pueblo británico sepa que está enfermo.
En una presentación de su último libro, «Charles III: The Inside Story», organizada por la Asociación de Prensa Extranjera en Londres, Hardman destacó que el rey «se toma muy en serio» su trabajo, también como jefe de la Iglesia anglicana o como jefe de Estado de los quince países que forman la Commonwealth, un rol diplomático que, según el autor, le gusta particularmente.
Así, en la próxima cumbre de la organización en Antigua y Barbuda en 2026, está previsto que surjan en su presencia debates complicados sobre la memoria histórica o la esclavitud practicada por el imperio británico, que el rey no piensa rehuir, subrayó.
Hardman hizo suya la idea de algunos historiadores de que los dos grandes «poderes blandos» del Reino Unido son la lengua inglesa y la monarquía, y aunque reconoció la legitimidad de una naciente opinión pública republicana, se mostró convencido de que en su gran mayoría el pueblo británico siente que la monarquía da estabilidad, como la dan las demás monarquías constitucionales en Europa.
Sobre la idea de que la monarquía necesita cambiar, la reformuló de otro modo: según él, las monarquías son en esencia el peso de una tradición, mientras que es al Gobierno al que le toca administrar los cambios sociales, pero sí admitió que toda monarquía debe «adaptarse» para garantizar su supervivencia.
Y si el príncipe heredero Guillermo ha dicho en alguna ocasión que tiene pensados grandes cambios el día que herede la corona, el biógrafo de Carlos III puntualizó que en ningún momento ha hablado de «cambios constitucionales».
Con respecto a la «oveja negra» de la familia, el príncipe Enrique, afirma que su libro «Spare» (En la sombra) y sus entrevistas en Estados Unidos han «quebrado la confianza» con su propia familia, especialmente con su hermano Guillermo, y vaticinó que Enrique podrá regresar poco a poco al Reino Unido -desde EEUU, donde reside desde 2020-, pero vio difícil que pueda recuperar algún tipo de función en la familia real.
Y sobre Andrés, el expríncipe ahora despojado de sus títulos por el rey Carlos III al conocerse sus relaciones con el pederasta estadounidese Jeffrey Epstein, dijo que el Palacio tiene razones para estar muy preocupado por una eventual llamada a testificar ante el Congreso de EEUU, dado el antecedente de su desastrosa entrevista en 2019, que hundió su reputación. EFE
fjo/jm/pddp
(foto)