El viaje iniciático de un campesino suizo
Con el filme del cineasta suizo Jean François Amiguet, “Au sud des nuages” comenzó la sección más importante del Festival de cine de Locarno, el concurso internacional.
También fue exhibida “16 years of Alcohol,” del escocés Richard Jobson.
Después de la exitosa proyección durante la jornada de apertura del miércoles, de la comedia musical “The Bald Wagon” de Vincent Minelli en la “Piazza Grande”, la noche del jueves se entró de lleno en el corazón del festival con la presentación de dos películas de gran interés: “Au sud des nuages”, del director suizo Jean-Francois Amiguet, y “16 years of Alchol”, del escocés Richard Jobson.
Conciencia y paisaje
El primero narra las peripecias de un campesino montañés de los Alpes suizos, rudo y de pocas palabras, el cual decide hacer un viaje en China con algunos amigos. La película intenta mostrar el drama de este hombre sin recurrir a diálogos, sino a otros tipos de figuras narrativas, las cuales constituyen la principal novedad de la cinta.
Una historia que transcurre lentamente, como es la vida en los pastoreos montañosos del cantón del Valais. El reflejo de la conciencia en el paisaje, o las dificultades del viaje como alegoría de la vida. Una película, simple, tierna y humana.
En búsqueda de redención
Por lo que se refiere a “16 years of alcohol”, este film equilibrado y dinámico narra la historia de un hombre que se enfrenta con mecanismos sociales y psicológicos deletéreos. Su infancia difícil y su carácter violento le marcarán para siempre la existencia, no obstante la esperanza de rescate representada por el amor de dos mujeres.
A esta búsqueda de redención se une una excelente y agradable reconstrucción de la música escocesa que va desde los años sesentas a los ochentas, pasando del eska al pop y al punk.
La “Piazza Grande”
También la “Piazza Grande” ofreció la noche del juevess en su espectacular pantalla (la más grande del mundo) un espectáculo de cine y de música con la presentación, fuera de concurso, del filme belga “Any way the Wind Blows”, de Tom Barman.
Se trata de un film ambientado en el futuro, con 8 jóvenes protagonistas que viven en la ciudad porteña de Amberes. Son todos chicos bien radicados en su tiempo y en su ambiente, que siguen la moda y tienen proyectos concretos, pero que al mismo tiempo comparten un sueño: que un fuerte viento devastador llegue, borre las experiencias del pasado y proyecte a todos ellos en un mundo nuevo.
Una historia que revela la inquietud de las nuevas generaciones, las únicas capaces de imaginar una transformación radical de la vida humana sobre el planeta.
Al referirse al Festival, su presidente Marco Solari dijo que “Serán once días de cine y de fiesta”. Una feria cinematográfico-musical que, para esta edición 2003 tiene como invitado de honor al Jazz. Es decir, un Festival que privilegia la música, de la misma manera que el año pasado lo constituyo, la literatura.
La sinergia entre el cine y el jazz, nació casi contemporáneamente, y tienen una larga historia en común. El jazz presente a través de 115 filmes presentes en las diferentes secciones del festival.
El programa prosigue este viernes, donde destaca el filme del italiano Lucio Pellegrini, “Ora o mai piú”. Es la historia ordinaria y extraordinaria al mismo tiempo de un estudiante del último año de física en la escuela Normal de Pisa, el cual decide participar a las manifestaciones antiglobal del G8 en Génova.
Por su parte, la realizadora estadounidense Catherine Hardwicke se presentará en concurso “Thirteen”. Es la historia de Nikky, una crónica abierta y lúcida de las transformaciones que sufre una adolescente de nuestra época.
Lupita Aviles, Locarno
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