
De la sastrería fluida a la inspiración tribal en la moda de París
París, 1 oct 2025 (EFE).- De creaciones que toman como base la sastrería masculina, de aspecto clásico, a modelos que nacen inspirados en ancestrales tribus. Estas dos tendencias han estado presentes en la tercera jornada de desfiles de París, en los que se están presentando las colecciones femeninas para la primavera-verano de 2026.
El diseñador nacido en Colombia Haider Ackermann (1971) ha firmado su segunda colección para Tom Ford, la marca creada hace veinte años por el célebre tejano del mismo nombre, tras haber cosechado éxitos en Saint Laurent y sobre todo en Gucci.
Si bien se caracterizaba en sus comienzos por la osadía y la sensualidad a flor de piel, en la era Ackermann lo que prima es la sugerencia, apostando sobre seguro: los trajes sastre de impecable factura, realizados en los mejores materiales.
En su pase, en el que han desfilado mujeres y también hombres de diferentes edades, ha dejado los vestidos en un segundo plano, destacando sobre todo los trajes chaqueta, rectos y cruzados.
Amplia gama de colores, del blanco al negro, pasando por grises, marrones, verdes, y con presencia de vitamínicos verde y naranja.
En el terreno de materiales, cuero, sedas, punto y encaje han sido algunos de los que se ha valido Ackermann para construir su colección, compuesta de prendas pensadas para durar.
El universo tribal, que ha unido herencia y modernidad, ha llegado con Balmain.
El responsable de sus colecciones, Olivier Rousteing (1985), ha apostado por conjuntos en los que los collares de varias vueltas ocupaban el lugar de clásicas prendas, junto a vestimentas realizadas en macramé, drapeados y un buen número de pantalones bombacho.
Si bien la presencia de vestidos cortos y sexys -una tendencia que le suele gustar a Rousteing- ha brillado prácticamente por su ausencia, la fluidez ha sido la tónica dominante de este desfile que ha clausurado la jornada de hoy. EFE
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