El ex máximo responsable de la red ferroviaria china enfrentará cargos por corrupción
Pekín, 5 dic (EFE).- El exdirector de la Administración Nacional de Ferrocarriles de China Fei Dongbin fue expulsado del Partido Comunista y será procesado judicialmente por «graves violaciones de la disciplina y la ley», una fórmula habitual empleada por las autoridades del país para referirse a casos de corrupción.
La Comisión Central de Inspección Disciplinaria (CCDI, el poderoso órgano anticorrupción del PCCh) y la Comisión Nacional de Supervisión, agencia equivalente dentro del aparato estatal, abrieron en junio pasado una investigación contra Fei, quien estaba suspendido de su cargo desde entonces.
De acuerdo a la pesquisa, el funcionario habría «abusado de su poder para asegurarse beneficios en operaciones de negocios, contratación de proyectos y ascensos de personal para otros a cambio de grandes sumas de dinero y bienes valiosos», indicó este viernes la CCDI en un comunicado.
Fei, según el organismo supervisor, «perdió su fe y sus ideales, fue débil respecto a sus responsabilidades políticas y abrazó el oportunismo y las maniobras políticas», señala la nota, que también indica que el alto cargo no cooperó con la investigación.
El funcionario, cuyas ganancias ilícitas han quedado confiscadas. ocupaba uno de los cargos más altos en el aparato de regulación ferroviaria del país, supervisando uno de los sistemas de trenes de alta velocidad más grandes del mundo.
También era miembro del grupo dirigente del Ministerio de Transporte, lo que le confería influencia significativa en la planificación e implementación de políticas nacionales de infraestructura.
Tras su llegada al poder en 2012, el actual secretario general del PCCh y presidente del gigante asiático, Xi Jinping, inició una campaña anticorrupción en la que varios altos cargos han sido condenados por aceptar sobornos millonarios.
Xi volvió a pedir en enero pasado «ganar resueltamente la dura y prolongada batalla contra la corrupción», que calificó como «la mayor amenaza» para el PCCh.
La campaña ha sido presentada por el Gobierno como un esfuerzo por mantener la disciplina interna, aunque algunos expertos advierten que también podría servir para neutralizar a rivales políticos. EFE
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