Eslovaquia alerta de que está superada su capacidad de alojar refugiados

Praga, 31 oct (EFE).- El Gobierno de Eslovaquia advirtió este martes de que están superadas las capacidades del país centroeuropeo para alojar refugiados, tras subir más del 400 por ciento las entradas de personas en situación irregular, que son en su gran mayoría provenientes de Siria.

El número de personas que entraron de forma ilegal en esta nación de 5,4 millones de habitantes asciende a 46.000 en lo que va de este año, mientras que en todo 2022 sumaron 10.900, informó el ministro de Interior eslovaco, Sutaj Esto, según la cadena TA3.

Las cifras contrastan con las de años anteriores, cuando la frontera de este socio comunitario a orillas del Danubio era cruzada ilegalmente cada año por apenas unos cientos de personas.

Sólo en los dos últimos meses (septiembre y octubre), los cruces ilegales fueron 21.500, casi la misma cifra, de 24.500, registrada entre enero y agosto, y que según la policía corresponden en un 97 por ciento a refugiados de Siria.

Estok alertó hoy de la situación tras una operación «preventiva» desplegada el lunes en la frontera con Hungría y que involucró a la policía de fronteras, drones, agentes a caballo, cañones de agua y un vehículo especial con termo visión, con una dotación de efectivos diez veces mayor que lo habitual.

El ministro, que confirmó que todo ese dispositivo no detectó la pasada noche ningún cruce ilegal, aseguró que su país no tiene actualmente capacidad para alojar en centros de retención a todos los inmigrantes irregulares.

También el flamante primer ministro, Robert Fico, que asumió este mes la jefatura de un Gobierno de coalición de socialdemócratas y nacionalistas tras una campaña electoral que entre otros arremetió contra la inmigración ilegal, se trasladó a la frontera ayer.

El fuerte aumento del flujo migratorio refleja un cambio en la ruta de los Balcanes que tras atravesar Serbia y Hungría pasa ahora por suelo eslovaco, desde donde las personas intentan llegar a otras naciones más ricas de la Unión Europea (UE).

Ello ha llevado a Polonia, Austria y la República Checa a introducir controles en sus fronteras con Eslovaquia a pesar de que ello contradice las normas del espacio de Schengen sobre libre circulación de personas y mercancías.

Por su parte, Eslovaquia fue el último país de la región en tomar este tipo de medidas, al establecer a principios de este mes controles en sus 655 kilómetros de frontera con Hungría. EFE

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