The Swiss voice in the world since 1935

En pleno vuelo, no todo es azul celeste

No siempre son sonrisas dentro de los aviones comerciales. Keystone

Las aerolíneas internacionales, incluida Swiss, observan un ligero incremento en la incidencia de pasajeros agresivos, sobre todo en vuelos prolongados.

Aquel que se resista a apagar su cigarrillo puede tener una multa de hasta 20.000 francos.

El cigarro y el alcohol se encuentran entre los problemas más frecuentes con los que debe lidiar la tripulación en los vuelos de Swiss, la aerolínea helvética.

Para el personal de a bordo mantener la sonrisa y la cordialidad no es, a veces, tarea fácil. Sobre todo si en pleno vuelo aparece algún pasajero indisciplinado que rete a una azafata desobedeciendo las reglas de conducta establecidas.

Los grados de la agresión son muy diversos, pero lo cierto es que son cada vez menos los profesionales del aire que aceptan ser maltratados por sus ‘invitados’.

Y es que no se trata sólo de una mala cara. La tripulación de Swiss denunció el año pasado 57 insultos y 16 agresiones físicas.

En total, la compañía aérea helvética registró 473 pasajeros indisciplinados. De ellos, 163 se rehusaron a apagar sus cigarrillos y otros 90 se encontraban en estado de ebriedad.

Los conflictos creados por los “mal educados” suelen girar en torno al asiento que se les ha asignado o a un desacuerdo por su equipaje de mano. También hay personas que no aceptan que su mascota viaje en el compartimiento especial para animales y tratan de introducir a toda costa a su animal en la cabina de vuelo.

De la advertencia a la sanción

El personal de cabina responde, en primera instancia, con una advertencia verbal simple al pasajero recalcitrante.

Pero la gravedad del incidente puede ser tal que deba ponerse al pasajero a disposición de las autoridades competentes. Tal caso ocurrió en Swiss el 1 de mayo del 2003, cuando 14 suizos en estado de ebriedad no desistieron de hacer ruidos estrepitosos con silbatos, a bordo de un avión que volaba de Zúrich a Berlín.

El piloto de la nave solicitó su arresto a las autoridades aeropuertuarias, bajo la acusación de comportamiento indebido que puso en riesgo el tráfico aéreo.

Sin embargo, los vuelos prolongados son los más concernidos, explica Jean-Claude Donzel, portavoz de Swiss.

Jörg Drittenbass, de la Unión del personal de Cabina Kapers advierte además que las exigencias de los pasajeros han aumentado a causa de la publicidad de las aerolíneas.

El sindicalista observa que los clientes pueden tener la desilusión de ver que los servicios ofrecidos en la publicidad por las aerolíneas, mostrando normalmente imágenes de la primera clase, no coinciden con la realidad en la clase turista.

Y en casos extremos: al aterrizaje forzoso

Los aterrizajes obligados a causa de un pasajero indisciplinado son excepcionales, pero ocurren. Y su costo afecta directamente al monedero del implicado.

La factura puede ascender a varias decenas de miles de francos. El portavoz de Swiss indica que en ella se incluye el costo del carburante, las tasas aeropuertuarias y los costos relacionados con el retardo de la nave para llegar a su destino final.

El último caso en Swiss ocurrió en marzo pasado, en un vuelo Zúrich-Nueva York. Un pasajero resultó incontrolable al amenazar verbal y físicamente a la tripulación.

El anterior, ocurrió en agoto de 2002, bajo las mismas circunstancias en un vuelo de Los Angeles a Zúrich.

Las sanciones calman los ímpetus

Aunque estos casos respondan a graves agresiones, lo cierto es que, según la Oficina Federal de Policía, las denuncias de incidentes violentos a bordo de los aviones aumentan ligeramente.

Varios factores inciden en el creciente número de casos de violencia en los vuelos comerciales. Uno de ellos es que el personal de cabina se detiene ahora menos que antes en su decisión de denunciar al provocador de problemas. “La tripulación ya no está dispuesta a aceptar este tipo de comportamiento”, constata al respecto Jörg Drittenbass, de Kapers.

Y las sanciones ayudan a calmar los ánimos. Por ejemplo, negarse a apagar un cigarrillo dentro de un avión de Swiss puede costarle al pasajero hasta 20.000 francos, según indica Célestine Parissinotto, portavoz de la Oficina Federal de la Aviación Civil (OFAC).

swissinfo y agencias

Swiss en 2003:
473 casos de indisciplina sobre 12 millones de pasajeros.
57 insultos y 16 agresiones físicas.
163 conflictos por cigarrillo y 90 por ebriedad.

Los preferidos del público

Los más discutidos

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR