Un testigo del tiempo duerme en el Lago de Thun

Un proyecto en curso trata de desencallar uno de los primeros barcos a vapor de pasajeros en Suiza.
El ‘Bellevue’ naufragó en 1864 a raíz de una tormenta, y desde hace 138 años yace en las aguas del Lago de Thun.
El misterio ocultó por mucho tiempo la exacta ubicación del barco. Hasta que un grupo de investigadores submarinos la descubrió en el verano del año pasado.
El navío se encontraba a pocos cientos de metros de la localidad de Oberhofen. Yacía cubierto de sedimento a unos 100 metros de profundidad.
El ‘Bellevue’ fue el primer barco a paleta que transportó viajeros por el Lago de Thun. Entró en servicio en 1835 y ha contribuido al arranque de la industria del turismo en el Oberland Bernés.
En una época en que la carretera y el riel apenas habían empezado a progresar, permitió a decenas de miles de viajeros acceder a los valles y las localidades de la región, incluyendo a la famosa estación de Interlaken.
Para localizar la embarcación, el equipo de investigadores debió recurrir a las técnicas más modernas: cámaras submarinas, sonares y detectores de metales. La aventura les exigió además mucha paciendia.
Sin tesoro a bordo
«El problema principal fueron los sedimentos que recubrían 90% del barco. Da la impresión de que después de haber sido recubrirlo, las corrientes submarinas se encargaron de despejarlo parcialmente», señala Tomi Peck, uno de los responsables del equipo.
Pero los sedimentos no sólo entrañan desventajas. Siendo pobres en oxigeno, permitieron la mejor conservación de la embarcación, o de lo que queda. Esa es al menos la esperanza de Tomi Peck.
No podemos esperar el hallazgo de tesoros a bordo del ‘Bellevue’. La nave ha sido efectivamente despojada de todos los muebles y las ricas decoraciones aplicadas cuando se convirtió en transportador de personas, en 1859.
En su última travesía, el barco llevaba un cargamento de sal, pero la tormenta impidió que llegara a puerto. El accidente se cobró también la vida del marinero a bordo. Jamás fue encontrado su cuerpo.
Valor histórico inestimable
El descubrimiento del ‘Bellevue’ ha puesto fin a casi 20 años de búsqueda emprendida por Markus Krebser, dueño de una librería y apasionado de la historia. Sus averiguaciones arrancan en 1985, año coincidente con el 150 aniversario de la puesta en servicio del barco.
«Es sensacional haberlo encontrado, pero el provenir del barco es aún incierto», señala Krebser.
La sociedad Blue Water – que reúne a quienes buscaron el ‘Bellevue’ -, estima que harán falta unos 600.000 francos para desencallarlo y restaurarlo. Por ahora no ha sido recolectada esa suma.
El valor histórico de la embarcación es, en cambio, inestimable. Varios barcos a paleta han sido restaurados en Suiza, pero todos ellos datan del siglo 20. La restauración del ‘Bellevue’ permitirá pues llenar una laguna en el conocimiento de la navegación por los lagos suizos.
Hasta ahora, el órgano, la sirena de niebla y las linternas pintadas son las únicas piezas que sobrevivieron al ‘Bellevue’. Son conservadas en el museo de Thun, pero sólo el órgano está expuesto al público.
Swissinfo, Dale Bechtel
(Traducción: Juan Espinoza)
El viaje inaugural tuvo lugar en 1835.
El navío transportó 25.000 pasajeros en su primer año de servicio.
Necesitaba 90 minutos para navegar de Thun a Interlaken.
La familia Knechtenhofer construyó el primer hotel de Thun, el Bellevue, en 1834.
Un año después pidió a un astillero de París la construcción de un barco a paleta.
50 toneladas de material fueron enviadas por hipomóvil (caballerías) desde París a Thun, donde la nave fue armada.

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