La estatal de electricidad prevé apagones simultáneos en casi el 55 % de Cuba este jueves
La Habana, 11 dic (EFE).- La empresa estatal Unión Eléctrica (UNE) prevé este jueves apagones durante toda la jornada que afectarán a la misma vez a cerca del 55 % de Cuba durante el horario de mayor consumo de energía en la tarde-noche.
Cuba atraviesa una grave crisis energética desde mediados de 2024 por las frecuentes averías en las centrales térmicas cubanas, que operan con un pésimo estado técnico y con décadas acumuladas de explotación, y la falta de divisas para importar el combustible para producir energía.
Ello provoca prolongados apagones y la consecuente paralización de la vida diaria y económica de la isla.
La UNE, perteneciente al Ministerio de Energía y Minas, pronostica para el horario “pico” de la jornada, en la tarde-noche una capacidad de generación de 1.565 megavatios (MW) y una demanda máxima de 3.400 MW.
El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 1.835 MW y la afectación -lo que se desconectará realmente para evitar apagones desordenados- alcanzará los 1.865 MW, según la UNE.
Actualmente, seis de las 16 unidades de producción termoeléctrica operativas están fuera de servicio por averías o mantenimientos. Estas fuentes de energía deberían aportar un 40 % del mix energético.
Asimismo, 98 centrales de generación distribuida (motores) están inoperativos por falta de combustible (diésel y fueloil) y cerca de están paradas por falta de lubricante. Esta fuente debería suponer un 40 % del mix energético.
Expertos independientes señalan que esta crisis energética responde a una infrafinanciación crónica del sector, completamente en manos del Estado desde el triunfo de la revolución en 1959. El problema es estructural y no hay salida posible a corto o medio plazo, agregan.
Por su parte, el Gobierno cubano señala al impacto de las sanciones estadounidenses a esta industria y acusa a Washington de “asfixia energética”.
Los apagones lastran la economía, que se ha contraído un 11 % en los últimos cinco años, y han sido el detonante de protestas sociales. EFE
lbp/sbb