La ultraderecha francesa politiza el atropello mortal de un gendarme por un inmigrante
París, 28 ago (EFE).- El atropello mortal de un gendarme francés por un inmigrante ha sido politizado este miércoles por la extrema derecha para pedir más mano dura y la expulsión de los delincuentes extranjeros.
Durante el homenaje celebrado en honor al gendarme fallecido en Mandelieu-la-Napoule (sureste), su viuda tomó la palabra y señaló a las autoridades francesas como responsables de la muerte.
«Francia mató a mi marido por su insuficiencia, su laxitud y su exceso de tolerancia», expresó Harmonie Cowyn, visiblemente afectada.
El autor del atropello tiene un historial de diez condenas, varias de ellas por delitos de tráfico, y la viuda se preguntó «¿Por qué este hombre multireincidente podía actuar en total libertad? ¿Cuándo abrirán los ojos nuestros legisladores?».
Poco después, y mientras se divulgaban más detalles del caso, se produjeron reacciones del ultraderechista Agrupación Nacional (RN) y de sus aliados para atacar al Gobierno y a la Justicia por lo que consideran falta de contundencia del sistema.
«Dejemos de tolerar a quienes arruinan la vida de los franceses, expulsemos a los delincuentes y criminales extranjeros, restablezcamos una justicia que castigue severamente», manifestó el presidente Jordan Bardella a través de la red social X.
El diputado Éric Ciotti, líder de la facción del partido conservador Los Republicanos que se alió con el RN en las últimas elecciones legislativas expresó su firme apoyo a la viuda y apoyó la contundencia del discurso de la viuda del gendarme.
«Lo que dijo hoy fue fuerte, no violento, sino poderoso. Su mensaje debe ser escuchado y comprendido para que podamos finalmente actuar. Creo que es un punto de partida crucial para aquellos que esperan un cambio en la dirección del país», afirmó Ciotti.
Por otro lado, el presidente Emmanuel Macron expresó sus condolencias a la familia del gendarme fallecido, del que dijo que fue «atropellado por un delincuente», pero evitó entrar en consideraciones políticas.
El incidente ocurrió en la noche del lunes pasado, en un control de tráfico en el departamento de Alpes Marítimos (sureste), donde el gendarme Éric Cowyn fue arrollado por un vehículo que no se detuvo ante la señal de alto.
El conductor, un hombre de origen caboverdiano que reside legalmente en Francia, se entregó posteriormente a la policía varias horas después, cuando estaba en estado de embriaguez.
Su historial delictivo tiene 10 condenas, principalmente por atentados contra personas e infracciones de tráfico.
El conductor admitió al ser interrogado que atropelló «involuntariamente» al gendarme de 54 años durante un control de alcohol en sangre. El automovilista alegó que huyó del lugar «presa del pánico» y que «no vio al gendarme en la carretera», según informó este miércoles la Fiscalía de Grasse. EFE
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