
La Unión Africana condena el ataque yihadista contra una prisión en Somalia
Nairobi, 6 oct (EFE).- El presidente de la Comisión de la Unión Africana (UA), Mahmoud Ali Youssouf, condenó el ataque perpetrado el pasado sábado por el grupo yihadista Al Shabab contra una prisión de alta seguridad en Mogadiscio, capital de Somalia, que «provocó la pérdida de vidas y dejó a varios heridos».
En un comunicado difundido este domingo a última hora, Youssouf expresó sus condolencias al Gobierno y al pueblo somalí, así como a las familias de las víctimas, y deseó una pronta recuperación a los heridos.
El presidente garantizó al Gobierno somalí «la plena solidaridad y el compromiso inquebrantable de la Unión para neutralizar la amenaza generalizada que representan el terrorismo y el extremismo violento en Somalia, la región del Cuerno de África y todo el continente”.
La UA subrayó que la Misión de Apoyo y Estabilización de la Unión Africana en Somalia (AUSSOM) mantiene un papel fundamental en la estrategia antiterrorista del país, en coordinación con las Fuerzas de Seguridad de Somalia, para restaurar la paz y la estabilidad.
Youssouf instó, además, a los Estados miembros de la UA, incluidos los que aportan tropas y personal policial a la AUSSOM, así como a la comunidad internacional, a intensificar el apoyo a Somalia y la misión de la organización panafricana para eliminar la amenaza de Al Shabab y otros grupos terroristas.
El ataque, reivindicado por Al Shabab, fue dirigido contra la prisión de Godka Jilacow en Mogadiscio, donde están recluidos miembros del grupo.
Una potente explosión de coche bomba precedió a un tiroteo, y las fuerzas de seguridad abatieron a los siete atacantes.
Las autoridades no precisaron si hubo víctimas entre los civiles o las fuerzas de seguridad, aunque señalaron que los agresores utilizaron un vehículo y uniformes similares a los del Ejército para evadir controles.
El grupo yihadista, afiliado desde 2012 a la red terrorista de Al Qaeda, comete atentados frecuentes para derrocar al Gobierno central -respaldado por la comunidad internacional- e instaurar un Estado islámico de corte wahabí (ultraconservador).
Controla zonas rurales del centro y el sur de Somalia y también atacan a países vecinos como Kenia y Etiopía.
Somalia vive en un estado de conflicto y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barre, lo que dejó al país sin gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra. EFE
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