Liberalización del aborto
En votaciones federales, este domingo los suizos aceptaron la modificación del Código Penal para hacer más flexible la práctica del aborto.
Este domingo (02.06) el electorado suizo fue llamado a las urnas para rechazar o aceptar 2 propuestas contrarias sobre la regularización del aborto.
La primera iniciativa de ley propuesta por el poder ejecutivo y legislativo federales, permite la interrupción voluntaria del aborto antes de las 12 semanas del embarazo en caso de alteración en la salud física o psicológica de la futura madre.
La otra iniciativa, de procedencia popular y conservadora, estipulaba restringir la práctica del aborto sólo en casos en los que la salud de la mujer corriera peligro. Básicamente se fundamentaba en la defensa de la vida del pequeño por nacer y proponía apoyo a la madre en situación difícil.
72% aprobó la flexibilización del aborto
Los votos recolectados este domingo determinan que 72% de los ciudadanos suizos que acudieron a las urnas apoyaron la propuesta gubernamental.
Por el contrario, 82% de los votos mostraron su rechazo a la iniciativa popular, denominada “Por la madre y el niño”, que restringía el aborto.
La propuesta a favor de mayor flexibilidad para la interrupción del embarazo contaba con el argumento social, indicando que la realidad exigía con urgencia una nueva reglamentación para la interrupción del embarazo.
Suiza se alinea a otros países europeos
Con las futuras modificaciones al Código Penal, la Confederación Helvética se suma a las disposiciones de la mayoría de los países de Europa Occidental, que permiten la realización del aborto voluntario en el periodo embrionario, es decir, en los 3 primeros meses del embarazo.
Los primeros en impulsar mayor apertura para la práctica de la interrupción del embarazo fueron Islandia, Suecia y Dinamarca, seguidos de países como Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Italia, Noruega y Holanda.
Luego de 3 décadas de este impulso al aborto voluntario, Suiza es uno de los últimos países europeos en debatir sobre su liberalización, junto con Inglaterra, España y Portugal.
Sólo una simplificación del proceso
Sin embargo, tanto aquí como en esos países, las ley en sí misma no determina la ejecución de un aborto, práctica que depende de la interpretación de las leyes y de su forma de aplicación. De facto, en Suiza el aborto no es castigado desde 1988.
Por ello, los círculos médicos argumentan que estas nuevas modificaciones de ley no son realmente necesarias, pues con los lineamientos hasta ahora establecidos se pueden realizar los abortos voluntarios en el marco de la legalidad.
Además, el aborto en Suiza es reembolsado por el seguro de enfermedad obligatorio, a fin de evitar precios inusuales y que mujeres sin recursos expongan su salud en manos no calificadas.
12 mil abortos anuales
Suiza cuenta con una vieja regulación sobre el aborto que data de hace 60 años.
Pese a la logevidad de la legislación -que establece al aborto como ilegal a excepción del caso en el que la mujer se encuentre en peligro grave y el embarazo atente contra su salud- se realizan año con año un promedio de 12 mil abortos.
El punto más criticado de la ley de 1942 es el requisito que hasta ahora obligaba a la mujer a presentar un segundo certificado de un médico autorizado por el Estado para la realización de la interrupción del aborto, además de la evaluación del médico familiar.
Las agrupaciones a favor de la liberalización han criticado que la determinación del aborto esté en manos de terceros y no sea decisión propia de la mujer en cinta.
Adelante el ‘régimen de plazo’
Con las modificaciones aprobadas este domingo por la ciudadanía, concluye la obligación de presentar el certificado de un segundo médico.
La mujer en cinta tendrá que demostrar su situación de dificultad y presentar una demanda escrita. De esta forma el aborto se hace legal en las primeras 14 semanas después del último periodo menstrual.
Datos estadísticos confiables sobre la frecuencia de la práctica de la interrupción del embarazo indican que por cada 7 u 8 nacimientos en Suiza, se realiza un aborto voluntario.
El método más utilizado es la aspiración, que succiona al embrión, quien alcanza hasta las 12 semanas de vida un peso de 14 gramos y un tamaño no mayor a 8 cm.
Las mujeres que más recurren al aborto en Suiza tienen entre 20 y 35 años de edad y entre el 40 y 60% de ellas son de nacionalidad extranjera.
Decisión “liberal y razonable”
En este contexto, en Suiza el aborto no es, como en los países en desarrollo, una problemática social por la carencia de medios de anticoncepción. Lo aprobado este domingo fue, en realidad, la decisión de poner en papel lineamientos claros sobre una cuestión controvertida.
Una decisión “liberal y razonable”, como advierte la diputada Barbara Haering, quien lazó este debate sobre el aborto en 1993, depositando la iniciativa que ahora, 9 años después, es aceptada por el electorado suizo.
Patricia Islas Züttel
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