Migros y Coop dicen pedir el certificado EurepGAP
Las dos cadenas de supermercados suizas indican que exigen a sus proveedores de El Ejido esta norma.
El gobierno español promueve activamente su adopción, indica la Consejería Comercial de la Embajada de España en Berna. Por su parte, la delegación del FCE critica los controles de este sello.
No se trata de rechazar los productos almerienses sino de hacerlos aceptables al consumidor suizo bajo el cumplimiento de reglas de producción que respeten al medio ambiente y al ser humano, advierte el diputado federal John Dupraz.
El también vicepresidente de la Unión Campesina Suiza y miembro del Consejo de Europa estuvo presente en El Ejido y a su vuelta a Suiza, en conversación con swissinfo aborda el cumplimiento de las normas EurepGAP en Almería.
Según constataciones del político ginebrino, en los alrededores de El Ejido “no se controla adecuadamente la norma EurepGAP”.
Pierrette Rohrbach, presidenta de la Federación de Consumidores de la Región Francófona de Suiza indica también que durante el viaje pudo comprobar la falta de respeto de esta norma cuando constató que “un productor no conocía el nombre de esta certificación, pero en sus productos, figuraba la etiqueta ‘bajo la norma EurepGAP”.
Migros, en voz de su responsable de la calidad de las frutas y verduras, Johann Züblin, indica que “el control EurepGAP se hace” y en los casos de que se sospeche que no se cumpren “estaremos muy interesados en conocer las empresas concernidas”.
Futuros proyectos para mayor control
Züblin reiteró a swissinfo que Migros exige la certificación EurepGAP. “Un estándar que trata de una producción integrada que cuida el ambiente y el cuidado social y ético” y está en conversaciones para establecer mayores normas de respeto social a través de un programa piloto, también con la organización privada Eurep, pero este concepto estará maduro en uno o dos años.
En España, Migros tiene un agrónomo que se ocupa de los controles. Por otra parte, han hecho varios viajes a la región almeriense para controlar la situación con sus proveedores y pequeños productores, cuyos trabajadores “viven en casas y tienen un contrato estable”-
Sin embargo, el representante de Migros explica que sólo 1.5% de la producción de la región de Almería es importada a Suiza. “Migros vende cerca de la mitad de esta cantidad”, detalla.
Sybille Anwander del Coop también comenta que la situación general en Almería no es la ideal, pero que sus proveedores están comprometidos a respetar un acuerdo de calidad.
“La mayoría de nuestros proveedores firmaron este documento a finales del 2003”, indica, al mencionar que, obviamente, una autodeclaración no asegura completamente el cumplimiento de las exigencias sociales por lo que Coop planea un control a través de una organización independiente.
Por su parte, Enrique Godinez, Consejero Económico y Comercial de la Embajada de España en Berna indica a swissinfo sobre la norma EurepGAP:
“En lo que se refiere a la exportación de productos frescos, el gobierno español promueve activamente la adopción por parte de los productores españoles de las normas EurepGAP que garantizan la adopción de las llamadas “good agricultural practices” en la producción y comercialización de estos productos. A finales del 2003, más de 1.800 productores y comercializadotes españoles pertenecían ya a esta organización”.
Al cuestionársele en qué medida los hechos de 2000 en El Ejido incidieron en la exportación de productos agrícolas de esa región de España hacia Suiza, Godinez responde:
“La campaña promovida en el 2001 por el Foro Cívico Europeo y otras organizaciones cívicas contra la venta en las tiendas de Migros y Coop de productos originarios de El Ejido originó serias pérdidas a un buen número de exportadores españoles”.
Advierte que a la Consejería que representa le consta que tanto Migros como Coop han adoptado medidas específicas adicionales para garantizar que los productos cumplan con todos los requisitos legales, tanto de orden sanitario como de orden social y laboral.
El Ejido no es el único caso en Europa
No obstante, para el Foro Cívico Europeo lo importante es que en todo El Ejido se cumpla el respeto a las normas de producción fitosanitarias, al medio ambiente, a los convenios salariales y al respeto de orden social y humano. Y por supuesto, que ya no haya más actos racistas contra los inmigrantes.
Y por otra parte lamenta que El Ejido no sea el único caso al respecto en Europa. “Es similar en otros puntos de Europa. En el sur de Francia, en Holanda, en Italia. En realidad, desgraciadamente no tienen el privilegio de ser los únicos, hay otros que hacen lo mismo”, dice Lourdes Méndez del FCE.
Una mujer que como sus compañeros de viaje a El Ejido cree en una agricultura respetuosa. “Yo misma soy horticultora. Mi huerta es biológica, ecológica y yo produzco verdura de estación. No tengo la posibilidad, ni las ganas de cultivar tomates en febrero. Yo los cultivo en verano y hago mis conservas para el invierno o los seco”.
En el viaje a la región de Almería, realizado entre el 10 y el 14 de febrero pasado, participaron también Edouard Jaquenoud, presidente de la Unión de Productos Frescos de Ginebra; Willy Streckeisen, ex director de la Cámara de Agricultura en Ginebra y Wendy Peter, vicepresidenta de ‘Bio Suisse’.
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swissinfo, Patricia Islas Zuttel
Tomates, pimientos, berenjenas y pepinos, entre los alimentos importados por Coop y Migros desde El Ejido.
Ambos comercios exigen la Norma EurepGAP a sus proveedores.
La Norma EurepGAP tiene su origen en las “Buenas Prácticas Agrícolas” y es aplicada por los productores agropecuarios europeos.
Por ahora la norma se aplica en la producción de frutas y vegetales frescos.
Eurep significa “Grupo de Trabajo de Productores Minoristas Europeos” en su sigla inglesa.
GAP son las siglas de ‘Good Agricultural Practice’.
El FCE cuestiona los controles de la Norma EurepGAP en Almería.
La región en la provincia de Almería cubre 35.000 hectáreas de invernaderos y se llama Poniente.
Se trata de la más grande concertación de producción hortícola bajo plástico en el mundo.
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El problema del agua en una zona árida como Almería también es cuestionado por el FCE.
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