
Movimiento indígena de Ecuador exige liberación de detenidos en las protestas contra Noboa
Quito, 25 sep (EFE).- La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), la mayor organización social de Ecuador, exigió este jueves la inmediata liberación de los detenidos en las protestas convocadas por el movimiento indígena contra el Gobierno del presidente Daniel Noboa y denunció el traslado a cárceles peligrosas de al menos diez que recibieron prisión preventiva, tras ser imputados por supuesto terrorismo.
«Responsabilizamos directamente al Gobierno de Daniel Noboa por estos hechos que criminalizan la protesta social y colocan en riesgo inminente la vida e integridad de nuestros comuneros y compañeros», señaló la Conaie en un comunicado.
«Exigimos la liberación inmediata de los detenidos, el respeto pleno a los derechos humanos y garantías efectivas de vida», añadió.
La Confederación indígena, que agrupa a las 14 nacionalidades y 18 pueblos indígenas que habitan en Ecuador, denunció también «la responsabilidad internacional del Estado por no garantizar la seguridad de los centros penitenciarios, incumpliendo su deber de protección».
De acuerdo a la Conaie, al menos diez protestas detenidos que luego fueron enviados a prisión provisional tras presentarles la Fiscalía cargos por presunto terrorismo fueron llevados presuntamente a las cárceles de Portoviejo y Machala, esta última escenario este mismo jueves de una masacre carcelaria donde 17 presos fueron asesinados.
Hasta la fecha, y según datos del Ministerio del Interior, 85 personas fueron detenidas en el marco de las manifestaciones acontecidas en el país desde este lunes, a las que el presidente Noboa se refirió como «actos terroristas disfrazados de protesta social».
Además, y en relación a los incidentes registrados en la provincia de Imbabura, donde hubo quema de vehículos en una comisaria y agresiones a dos policías, un juez admitió el pedido de la Fiscalía este miércoles y ordenó el ingreso en prisión preventiva de doce de los trece imputados por terrorismo.
En estos cuatro días de paro, la provincia de Imbabura se consagró como el epicentro de las protestas. El pasado lunes, en la ciudad de Otavalo, un millar de manifestantes atacó un destacamento policial, dañó su infraestructura y quemó vehículos policiales y particulares.
Este jueves se sumaron a las protestas comunidades indígenas de la amazónica provincia de Napo.
«El paro continua de manera progresiva. Invitamos a todos los pueblos y sectores de Ecuador. Condenamos la prepotencia del Gobierno nacional. Hoy nuestros hermanos están encarcelados y han sido trasladados a otras provincias», dijo en un mensaje publicado en redes sociales el presidente de la Conaie, Marlon Vargas.
«(Noboa) ha empezado a entregar dádivas y a dividir a las organizaciones. Estamos aquí convencidos a luchar. Estamos firmes en decir basta ya la prepotencia y tiranía del Gobierno nacional», dijo el líder indígena en referencia a los bonos y otras ayudas sociales entregadas por el jefe de Estado estos días en las provincias que concentran las protestas.
El detonante de estas protestas fue la eliminación de la subvención estatal diésel decretada por Noboa, que hizo que el precio de este combustible subiese de la noche a la mañana de 1,80 a 2,80 dólares por galón (3,78 litros).
El movimiento indígena ya lideró en 2019 y 2022 las masivas protestas que llevaron a los presidentes Lenín Moreno (2017-2021) y Guillermo Lasso (2021-2023) a dar marcha a atrás cuando también quisieron eliminar las subvenciones estatales a los combustibles para cumplir con las metas de ajuste fiscal de los programas crediticios firmados con el Fondo Monetario Internacional (FMI). EFE
fgg/gpv
(foto)