Proyecciones de la Fed apuntan a más crecimiento en EE.UU. en 2026 gracias a consumo e IA
Washington, 10 dic (EFE).- El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, indicó este miércoles que las últimas proyecciones económicas del organismo apuntan una aceleración del crecimiento económico en EE.UU., que podría expandir su producto interior bruto (PIB) por encima del 2,5 % el año próximo apoyado aparentemente sobre la resiliencia del consumo y la inversión en inteligencia artificial.
Powell explicó en una rueda de prensa que el último resumen del año de proyecciones que los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) elaboraron apunta a que el PIB estadounidense crecería un 1,7 % este año y un 2,3 % el próximo, una décima y medio punto por encima del anterior pronóstico de septiembre.
«Varios factores están influyendo en lo que se observa en las previsiones», indicó Powell acerca de este sumario de proyecciones, que se publicará el próximo 30 de diciembre junto a las minutas de la reunión recién concluida, en la que la Fed decidió acometer un tercer recorte de tipos consecutivo de un cuarto de punto que deja el referencial entre el 3,5 % y el 3,75 %.
Powell aseguró que las previsiones de otros analistas ajenos a la Fed también apuntan a una aceleración del crecimiento en la primera economía mundial.
«Esto se debe, en parte, a que el gasto de los consumidores se ha mantenido firme y ha demostrado ser resistente, y en otra medida, a que la inversión en inteligencia artificial, tanto en centros de datos como en áreas relacionadas, ha impulsado la inversión empresarial», aseguró el presidente de la Fed.
En cuanto a los condicionantes que llevaron a la entidad emisora a volver a recortar el precio del dinero, Powell destacó que «los riesgos para la inflación se inclinan al alza y los riesgos para el empleo a la baja; una situación compleja».
«No existe un camino exento de riesgos en materia de política económica mientras lidiamos con esta tensión entre nuestros objetivos de empleo e inflación», afirmó el presidente de la Reserva Federal, que en todo caso aseguró que la decisión adoptada hoy sitúa al banco central estadounidenses «en una buena posición» para atajar desafíos futuros.
Pese a que el reciente cierre del Gobierno Federal estadounidense ha retrasado los datos de empleo de octubre y dado al traste con los de la inflación para ese mismo mes, el presidente de la Fed aseguró que el actual panorama sugiere «que tanto los despidos como las contrataciones siguen siendo bajos».
En materia de precios, con la última subida del IPC de septiembre en el 3,02 %, el economista, que hasta ahora había sido más cauto al señalar los efectos de la política comercial del Gobierno Trump, señaló hoy que «más de la mitad del exceso de inflación» que afecta a los bienes en EE.UU., se debe a los aranceles.
A su vez, volvió a insistir en el escenario de que los efectos al alza en los precios de los gravámenes en las aduanas estadounidenses sean temporales.
«Un escenario base razonable es que los efectos de los aranceles sobre la inflación sean relativamente transitorios, constituyendo, en esencia, un cambio puntual en el nivel de precios. Nuestra obligación es asegurarnos de que un aumento puntual del nivel de precios no se convierta en un problema de inflación persistente», explicó. EFE
asb/sbb