Perspectivas suizas en 10 idiomas

Clima: Los científicos se baten con su pluma

Danzas de Bali para protestar contra el calentamiento del planeta. Keystone

Más de 200 científicos del mundo entero -incluidos 10 suizos- exhortan a la comunidad internacional a tomar medidas radicales contra el calentamiento del planeta.

En una declaración presentada durante la conferencia internacional sobre el clima en Bali, los investigadores exigen reducir a la mitad las emisiones de CO2 de aquí al año 2050.

“No hay tiempo que perder”, claman los científicos que piden a los participantes en la conferencia de Bali negociar el próximo tratado contra el calentamiento del planeta.

Este llamado da seguimiento a una petición firmada la semana pasada por más de 150 empresarios que también pedía una reducción a la mitad de las emisiones de gas de efecto invernadero.

“Es una grave crisis y debemos hacer algo rápidamente”, alerta uno de los signatarios, Jeff Severinghaus, profesor estadounidense de Ciencias de la Tierra. “Lo que está en juego es demasiado importante”.

En diez años

De los diez investigadores suizos que firmaron la declaración, ocho participaron en los trabajos del Grupo intergubernamental de expertos sobre el clima (Giec), laureado con el Premio Nobel de la Paz 2007.

Según Reto Knutti, del Instituto de investigaciones sobre la atmósfera y el clima de la Escuela Politécnica Federal de Zúrich (EPFZ), el objetivo debería ser limitar a dos grados como máximo el aumento de la temperatura global con respecto a la situación previa a la industrialización.

“Si queremos alcanzar ese objetivo, debemos detener el aumento de las emisiones de CO2 en los diez años que vienen”, advierte el profesor. Después de eso las emisiones de gas de efecto invernadero deberían bajar drásticamente – por lo menos en 80% – para el año 2100.

En la hipótesis de que las emisiones continúen produciéndose al ritmo actual, Reto Knutti predice un porvenir sombrío para el planeta: El casco de Groenlandia se derretirá y el nivel del mar subirá hasta seis metros. Países enteros, como Bangladesh, y ciudades costaneras, como Nueva York o Shangai, quedarán sumergidas.

Una primicia

Hasta ahora, numerosos científicos se habían abstenido de pedir la introducción de medidas dejando este tipo de acciones a las organizaciones de defensa del medio ambiente.

Esta declaración, firmada por científicos de más de 25 países, muestra que los especialistas del clima “están hastiados”, subraya Andrew Weaver, de la Universidad de Victoria, Canadá.

Entre los signatarios se encuentran numerosos miembros del Giec y los directores de los principales institutos americanos y europeos de investigación sobre el clima.

“Somos muchos los que pensamos que el problema merece más atención que la que tiene y que los remedios deben ser mucho más radicales”, enfatiza Richard Seager, del Observatorio de la Tierra, de la Universidad de Columbia.

Diversos investigadores también comienzan a perder la paciencia. “Se deben tomar medidas, y debe hacerse ahora”, insiste Marika Holland, del Centro Nacional sobre Investigación Atmosférica de Estados Unidos. “Cuanto más esperemos, más grave será”.

swissinfo y agencias

La conferencia de Bali apunta a la reducción de emisiones de gas de efecto invernadero. Pero también aborda el tema de las compensaciones destinadas a los países tropicales para incitarlos a luchar contra la deforestación, fuente del 20% de las emisiones de CO2.

Los debates giran también alrededor de un fondo de adaptación que debe permitir a las naciones pobres hacer frente a los efectos del cambio climático y adoptar tecnologías energéticas de punta.

El protocolo de Kyoto fue concluido en 1997.

Su objetivo: reducir hasta antes del 2012 las emisiones globales de gas de efecto invernadero a un nivel inferior del 5% al del 1990. Más de 170 países se comprometieron en el sistema.

En Suiza, el CO2 representa el 80% de las emisiones de gas de efecto invernadero. Para respetar sus compromisos, el país fijó en la ley el objetivo de reducir en 10% (respecto al nivel de 1990) las emisiones de aquí al año 2010.

Bajo la consideración de que las medidas voluntarias no bastarán, el gobierno optó por introducir un céntimo climático sobre los carburantes para el sector privado, exentar de impuestos los carburantes biógenos y aplicar una tasa sobre el CO2.

El Parlamento aceptó el principio de esa tasa.

Desde 2008, será de 12 francos por tonelada si las emisiones debidas a los combustibles bajan a menos de 6% en 2006 con relación a 1990.

Desde 2009, pasaría a 24 francos por tonelada si las emisiones bajan menos de 10% en 2007.

Desde 2010, pasaría a 36 francos por tonelada si las emisiones bajan menos de 13,5% en 2008 con relación a 1990.

En cumplimiento de los estándares JTI

Mostrar más: SWI swissinfo.ch, certificado por la JTI

Puede encontrar todos nuestros debates aquí y participar en las discusiones.

Si quiere iniciar una conversación sobre un tema planteado en este artículo o quiere informar de errores factuales, envíenos un correo electrónico a spanish@swissinfo.ch.

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - unidad empresarial de la sociedad suiza de radio y televisión SRG SSR