Delegación suiza en Brasil, país de contrastes
Una delegación compuesta por veinte personalidades académicas, políticas y asociativas suizas pudo descubrir la realidad social brasilera durante una visita a los Estados de Bahía y Sergipe en el noreste de ese país sudamericano.
“Estoy profundamente conmovido por lo que vimos, escuchamos y sentimos”, señala el profesor Jean-Jacques Friboulet, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de Friburgo.
Durante la visita fue posible observar un Brasil lleno de contrastes, un país que como potencia mundial impulsa proyectos económicos ambiciosos hacia el exterior y al mismo tiempo el Brasil “popular” que se bate con decisión por el ejercicio de derechos esenciales, especialmente a la tierra y a la vivienda, analiza el también catedrático de Historia Económica y Economía del Desarrollo.
La misión suiza permaneció nueve días en Brasil a lo largo de los cuales se encontró con secretarios de Estado del Gobierno bahiano y visitó diferentes proyectos de la UNIAO (Unión Nacional por la Vivienda Popular) y del Movimiento de Trabajadores Rurales sin Tierra (MST), ambos contrapartes de la ONG helvética E-CHANGER.
Para el profesor Friboluet fue un “enorme privilegio” participar en la delegación y comprobar en el terreno la dinámica esencial de las organizaciones locales, “gracias al fuerte enraizamiento de los cooperantes suizos que trabajan aquí y a la credibilidad significativa de E-CHANGER, como organización de la sociedad civil helvética presente en ese país desde hace más de dos décadas”.
“Viajando solo, enfatiza, nunca hubiera podido descubrir estas realidades”.
“No necesitamos dinero”
En cuanto a la cooperación del Norte, el profesor Friboulet recuerda que César Lisboa, Secretario de Estado para Asuntos Institucionales del Estado de Bahía que recibió a la delegación fue muy preciso. “Nos dijo: ‘no necesitamos dinero. Pero siempre son bienvenidos los recursos humanos con competencias técnicas y sociales que quieran contribuir con las organizaciones sociales brasileras’”.
“Vuelvo impactado por esta experiencia”, ratifica Jean-Jacques Friboulet. Se dice pleno de energía y convencido de transmitir a sus estudiantes de Friburgo lo visto en Brasil, en particular el compromiso de los jóvenes voluntarios suizos en el terreno.
“Es parte de mi función académica. Y en el terreno he hecho un acelerado y práctico curso de economía política viendo, en particular, la capacidad de organización productiva del Movimiento de los Sin Tierra y de gestión de viviendas de la UNIAO”, concluye.
“Fuerza propositiva de los actores sociales”
“Estoy impresionada por la capacidad organizativa y de gestión de los movimientos sociales” enfatiza Anne-Catherine Ménetrey-Savary, ex diputada nacional por el Cantón de Vaud y personalidad reconocida en temáticas como asilo e inmigración, entre otras.
Ménetrey-Savary quien había participado ya en cuatro delegaciones previas a diferentes países latinoamericanos y africanos organizadas por E-CHANGER en los últimos años, no esconde su sorpresa ante la “masividad y capacidad de dichos actores sociales”.
Son organizaciones nacionales presentes en prácticamente todos los estados de la Nación y que hoy pueden impulsar verdaderos proyectos productivos como el promovido por el Asentamiento Jacaré Curituba del MST, el más grande de todo el país, que proporciona trabajo agrícola a casi 800 familias, asegurando la salud para todos y la educación para los niños y adolescentes.
Asímismo, “es impresionante comprobar que un movimiento social urbano como la UNIAO asegura la construcción y gestión de una cuarta parte de las viviendas populares en el Estado de Bahía”, insiste la ex consejera nacional.
Todas esas imágenes y percepciones vividas en estos días refuerzan “mi compromiso en Suiza”. Y, además, insiste, reconfirma una hipótesis que tenía antes de participar en esta delegación: para conocer la cooperación suiza con el Sur es esencial visitar el terreno, encontrar a la gente, ver los cooperantes y sus contrapartes locales… “No se puede hablar o decidir sobre proyectos de desarrollo del Sur sin conocer in situ la realidad que vive y protagoniza la gente de América Latina, África o Asia”, concluye.
La delegación visitó entre el 6 y el 16 de abril las ciudades de Salvador de Bahía; Candidé de São Francisco – en la región semiárida más afectada por la peor sequía desde hace varios años- y Aracajú, capital del Estado de Sergipe
Durante su estadía la delegación suiza pudo comprobar los preparativos para una semana muy activa de movilizaciones sociales.
Como cada año, la segunda semana de abril, el Movimiento sin Tierra (MST) convoca a movilizaciones nacionales por la reforma agraria, que incluye la ocupación de latifundios improductivos.
Lo hace en conmemoración de la masacre de Eldorado dos Carajá del 17 de abril del 1996 que costó la vida a 21 trabajadores agrícolas asesinados durante una movilización por la tierra.
Este martes 17, lo conmemoraron con un paro nacional de 21 minutos realizado a las 8 de la mañana.
Un día antes, 1.500 trabajadores rurales del MST ocuparon las instalaciones del Ministerio de Desarrollo Agrario en la capital Brasil para exigir la aceleración de entrega de tierras.
A pesar que Brasil cuenta con un Gobierno de centro-izquierda, el proceso de distribución de tierras en los últimos años ha retrocedido.
El MST denuncia, además, que en los últimos 10 años fueron cerradas 36 mil escuelas en el medio rural.
La organización rural ha lanzado una intensa campaña contra el uso de los agro-tóxicos. Según el MST, cada brasilero consume anualmente 5,2 litros de esos productos.
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