
Acusado en Polonia un bielorruso que ofreció sus servicios como saboteador a Rusia
Cracovia (Polonia), 8 ago (EFE).- Las autoridades polacas informaron este viernes de que han presentado cargos contra un ciudadano bielorruso residente en Bialystok (este de Polonia), que se ofreció supuestamente a Rusia para espiar o llevar a cabo actos de sabotaje contra Polonia, por lo que se enfrenta a una pena de entre seis meses y ocho años de prisión.
Según anunció hoy el portavoz de la Fiscalía Nacional, Przemysław Nowak, el individuo, Artsiom K., intentó ser contratado de manera «chapucera» por los servicios secretos rusos, mediante la publicación de anuncios en foros de internet y redes sociales, en donde ofrecía sus servicios de espionaje y sabotaje.
De acuerdo con los investigadores, entre el 8 y el 12 de diciembre de 2024, el ciudadano bielorruso manifestó su voluntad de emprender «acciones de inteligencia y subversivas» tanto en Polonia como en otros países de la Unión Europea.
Supuestamente, se ofreció a proporcionar «datos sobre la ubicación de infraestructuras críticas» en Polonia e información sobre ciudadanos bielorrusos disidentes con el régimen de Aleksander Lukashenko.
Aunque el acusado se declaró «no culpable» y trató de justificar sus acciones durante el interrogatorio como «un error», se enfrenta a una pena de entre seis meses y ocho años de cárcel si es condenado.
El primer ministro polaco, Donald Tusk, ha declarado recientemente que 32 personas se encuentran detenidas en Polonia, acusadas de colaborar con los servicios de inteligencia rusos en actos de espionaje y sabotaje dentro del territorio nacional.
Tusk precisó que entre los arrestados hay polacos, rusos, ucranianos, bielorrusos y un colombiano, y confirmó que uno de ellos ya ha sido condenado, mientras que el resto permanece a la espera de juicio.
Las autoridades polacas han asegurado que estos detenidos recibieron pagos, en algunos casos a través de criptomonedas, y que la mayoría de ellos fueron reclutados a través de redes sociales y plataformas de mensajería como Telegram. EFE
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