AI pide proteger derechos humanos en la lucha antiyihadista en Togo y Benín
Lomé, 27 jul (EFE).- Amnistía Internacional (AI) pidió este miércoles que se garanticen los derechos humanos en la lucha contra los grupos yihadistas que atacaron en los últimos meses el norte de Togo y Benín.
“Las fuerzas de seguridad cometen violaciones de los derechos humanos en el contexto de la lucha contra los grupos armados en Benín y Togo, especialmente contra los miembros de la etnia fulani”, musulmana en su inmensa mayoría, advirtió en un comunicado Samira Daoud, directora regional de AI para África occidental y central.
“Existe el riesgo de que las violaciones de los derechos humanos se vuelvan sistemáticas y se agraven, como ocurre en los países vecinos que llevan varios años luchando contra los mismos grupos armados”, agregó.
“En ambos países se ha detenido y encarcelado arbitrariamente a personas, sobre todo por su pertenencia a una comunidad”, según los testimonios recogidos por AI.
El pasado 16 de mayo, varias decenas de personas fueron detenidas en una localidad de la región de las Sabanas (norte) “por su origen étnico” y, tras el arresto, no tuvieron acceso a un abogado hasta que fueron liberados los días 20 y 21 de mayo sin ser acusados.
La organización advirtió también de que la amenaza de los grupos armados se utiliza como “pretexto” para restringir los derechos civiles y políticos, prohibiendo los mítines de partidos opositores.
En el caso de Benín, AI señaló el caso de dos periodistas detenidos y encarcelados durante cuatro días cerca del parque de Pendjari (norte) mientras realizaban una investigación tras ser considerados sospechosos de espionaje.
“En sus próximas conversaciones con las autoridades beninesas, el presidente francés (Emmanuel) Macron no debe pasar por alto estos abusos en nombre de una lucha global común contra el terrorismo, o de los intereses económicos y políticos de Francia”, dijo Daoud.
Macron se encuentra esta semana en una gira africana que comenzó en Camerún y que le llevará a Benín y a Guinea-Bisáu.
Desde principios de 2020, el norte de Benín ha sido atacado por hombres armados y, desde finales de 2021, el norte de Togo ha sufrido atentados atribuidos a un grupo yihadista aliado a Al Qaeda que opera en la región del Sahel.
El pasado 15 de julio, más de 20 personas murieron en ataques simultáneos contra varias localidades del norte de Togo.
A mediados de junio, el Gobierno de Togo aprobó un “estado de emergencia de seguridad” en la región de las Sabanas (donde se encuentran las localidades atacadas).
El pasado mayo, Benín decidió retirar a sus soldados presentes en Mali en la misión de la ONU (MINUSMA) para priorizar su seguridad interna ante la amenaza del yihadismo en el norte del país.
Desde hace años, muchos expertos han advertido de la posibilidad de que los grupos yihadistas que operan en el Sahel central (Burkina Faso, Mali y Níger) amplíen sus operaciones a países costeros de África occidental, como Togo o Benín. EFE
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