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Paisaje marino, 1975. (Collection privée New York)
Forma parte de una serie de imágenes elaboradas a partir de fotografías que Richter tomó durante un viaje a Groenlandia. 1975 y 1976 fueron años sombríos, tras el divorcio de su primera esposa.
Fondation Beyeler
S. con Infante, 1995. (Hamburger Kunsthalle)
A los 62 años, Richter encontró la felicidad conyugal con la artista Sabine Moritz. Una serie de ocho pinturas de 1995 muestra a Sabine con su recién nacida.
Fondation Beyeler
S. con Infante, 1995. (Hamburger Kunsthalle)
La serie de cuadros que muestran a Sabine con su hija se encuentra entre las obras más íntimas y personales de Richter.
Fondation Beyeler
Lectora, 1994. (San Francisco Museum of Modern Art)
Richter hizo diversas foto-pinturas inmediatamente después de su encuentro con Sabine. Revelan un sentimiento de tranquilidad y felicidad.
Fondation Beyeler
Bach (1), 1992. (Moderna Museet, Stockholm)
En 1972, Richter comienza a trabajar con colores brillantes. Veinte años más tarde, los utiliza de una manera abstracta, como en esta serie de cuatro pinturas de gran formato inspiradas en la música de Bach. Los compositores son un tema recurrente en Richter. Para las seis grandes pinturas de la serie Cage (2006) se inspiró en el compositor norteamericano John Cage.
Fondation Beyeler
Bosque, 2005. (The Museum of Modern Art, New York)
En 2005, Richter reúne 285 fotografías tomadas en un bosque cerca de Colonia. De ahí elabora un libro denominado Wald (Bosque) y una serie de 12 pinturas de gran formato. Había perfeccionado el uso del vidrio y fabricado un raspador de madera, lo que le permite suavizar las capas de pintura superpuestas.
Fondation Beyeler
Flores, 1992. (Hamburger Kunsthalle)
Richter dice de sus pequeñas foto-pinturas que son un medio de descansar de las grandes pinturas abstractas que exigen un enorme esfuerzo físico.
Fondation Beyeler
Betty, 1988. (Saint Louis Art Museum)
La producción de Richter en 1988 es muy diversa. Después de la serie sobre la banda Baader-Meinhof, hizo un retrato de su hija, Betty, fruto de su primer matrimonio. Esta es una de sus pinturas más emblemáticas. En la exposición de la Fundación Beyeler se encuentra junto con las pinturas Bach y Lectora. La sala está inmersa en la armonía y la alegría tranquila.
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La Anunciación según Tiziano, 1973. (Hirshhorn Museum, Washington D.C.)
En 1972, Richter entra en su fase “retoques”. Las imágenes figurativa son retrabajadas, como para hacerlas desaparecer en el lienzo. En 1973, hizo cinco versiones de La Anunciación según Tiziano.
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La Anunciación según Tiziano,1973. (Kunstmuseum Basel)
Hay cinco versiones de La Anunciación según Tiziano. Son presentadas por primera vez juntas en la Fundación Beyeler.
Fondation Beyeler
Ella, 2007 (collection privée)
Ella, la niña que Richter tuvo con Sabine Moritz, nació en 1996. Este pequeño retrato, hecho cuando Ella tenía diez años, figura en el panteón de los íconos de Richter.
Tocadiscos, 1988. (Museum of Modern Art, New York)
Richter utiliza imágenes halladas en periódicos y revistas como base para sus foto-pinturas, especulando a menudo sobre la fascinación del público con las catástrofes y la muerte. La pintura representa el tocadiscos de Andreas Baader, miembro del grupo terrorista alemán Fracción Ejército Rojo, dentro de su celda. Esta es una de las pinturas de su serie 18 de Octubre de 1977.
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Iceberg en la bruma,1982. (The Doris and Donald Fisher Collection)
En 1981 y 1982, Richter concibió una serie de paisajes brumosos de montañas y témpanos de hielo, un eco del romántico alemán Caspar David Friedrich, al que admiraba.
Fondation Beyeler
La exposición de la Fundación Beyeler (Basilea) es la más grande dedicada hasta ahora al artista alemán Gerhard Richter.
Este contenido fue publicado en
27 mayo 2014 - 11:00
Abierta hasta septiembre de 2014, engloba los grandes periodos de su carrera, incluyendo obras recientes aún no exhibidas. Durante 60 años, Richter pasó de foto-pinturas a obras abstractas, monocromos y composiciones generadas digitalmente. “Uno de mis grandes sueños es que mis imágenes se convierten en medio ambiente o arquitectura”, dice el artista. La exposición es el fruto de una colaboración entre Richter y el comisario suizo Hans Ulrich Obrist. (Imágenes: Fundación Beyeler. Texto: swissinfo.ch )
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