Biel, un paso por delante en integración
Biel es una de las ciudades suizas que más se distingue por los esfuerzos emprendidos a favor de la integración de los extranjeros.
Una atención especial reciben las mujeres y los más jóvenes, que cuentan con apoyo en los ámbitos escolar y profesional.
En el mes de mayo, Biel fue escenario de la primera Conferencia Nacional Tripartita sobre la Integración de los Extranjeros. La elección de esta ciudad bilingüe (alemán, francés) del cantón de Berna no fue casual.
Biel – que en su sitio Web califica la diversidad cultural de “enriquecimiento” – es muy activa en el frente de la integración y la promoción de la convivencia pacífica entre ciudadanos helvéticos y extranjeros.
Así lo confirma el redactor del semanario Rinascita, Pasquale Sacino, residente en Biel desde hace 40 años: “Se trata de una ciudad que siempre se ha distinguido por una hospitalidad especial hacia los inmigrantes.”
130 nacionalidades y 67 idioma
La localidad bernesa, que cuenta hoy con 50.000 habitantes, tiene una larga tradición en materia de inmigración.
“Basta recordar que a mediados de 1880 los relojeros del Jura se instalaron en Biel, convirtiéndola en la ciudad bilingüe más grande del país”, observa el alcalde Hans Stöckli, quien subraya las experiencias positivas vividas tras la llegada de los inmigrantes italianos en los años 60.
Hoy, sin embargo, la integración es un mayor desafío debido al creciente número de culturas, lenguas, religiones y estilos de vida diferentes que conviven en la ciudad. De ahí la necesidad – o más bien la voluntad por parte de las autoridades – de asumir un mayor compromiso a favor de los extranjeros.
No podría ser de otra manera, ya que uno de cada cuatro habitantes es de origen extranjero, como señala Stöckli. “En Biel conviven 130 nacionalidades diferentes y se hablan 67 idiomas.”
Discutir en el salón de casa
La localidad ha lanzado el Proyecto Integración, un programa de dos años de duración que contempla varios aspectos vinculados al proceso integrador en la sociedad de acogida, como explica a swissinfo la responsable Bettina Bergner.
“Uno de los proyectos más interesantes es el denominado FemmesTISCHE y está destinado a las mujeres y a las madres extranjeras. Éstas tienen la posibilidad de intercambiar opiniones y sugerencias en un contexto privado y en su idioma”, señala Bergner.
La idea es sencilla: una mujer invita a 7 u 8 compatriotas a su casa, junto con una animadora cultural. Con el apoyo de documentación y material fílmico, ésta se encarga de conducir un debate sobre temas relacionados con la vida diaria.
Por el momento, la ciudad de Biel dispone de 14 animadoras, cada una de una nacionalidad diferente. A escala nacional – FemmesTISCHE cosecha éxitos también en otros cantones, sobre todo en la Suiza de expresión alemana – hay más de 30.000 mujeres que se han beneficiado de esta iniciativa.
Una escuela para todos
Mientras las madres se reúnen para hablar de la educación o la sanidad, los hijos no se ven abandonados a sí mismos.
Gracias a las clases de acogida, los jóvenes extranjeros tienen la posibilidad de mejorar en cursos intensivos el aprendizaje de la lengua y el conocimiento del ambiente cultural que los rodea.
Cabe subrayar que el acceso a la enseñanza es independiente del estatus (permiso de estancia) que emite la policía de extranjeros. La escuela está abierta a todos.
Hans Stöckli señala asimismo que “Biel es la primera ciudad que promovió la figura del mediador lingüístico y cultural como persona de contacto entre la escuela y las familias de los migrantes.”
Otros programas tienen como objetivo facilitar el paso a la formación profesional y la búsqueda de un empleo, agrega el alcalde.
Solicitantes de asilo “bienvenidos”
En Biel también los solicitantes de asilo tienen derecho de integrarse en la sociedad que los acoge. La asociación Asilo Biel y Región les ofrece, por ejemplo, además de alojamiento, una ayuda financiera y un servicio de consulta sociopsicológica y sanitaria.
El proyecto Well-Come de la Oficina de Consulta sobre Asilo, por su parte, propone cursos gratuitos sobre diferentes aspectos de la vida en Suiza, mientras que movimenti favorece la integración de los solicitantes de asilo en asociaciones y clubes deportivos.
Sinergias de 360 grados
Pero no son sólo los numerosos programas a favor de la colonia extranjera los que convierten a Biel en una ciudad innovadora en materia de integración, sino también las sinergias que se han creado gracias a la labor de Bettina Bergner y sus colaboradores.
“Partimos de ideas que ya existían y las aplicamos a la realidad específica de Biel, creando varias sinergias y mejorando la colaboración con las instituciones que trabajan en el ámbito de la integración”, explica.
La voluntad por parte de las autoridades, no obstante, no es suficiente. “El primer paso decisivo lo tienen que dar quienes llegan a la ciudad”, advierte Hans Stöckli.
swissinfo, Luigi Jorio
(Traducción del italiano: Belén Couceiro)
Biel cuenta hoy con 50.300 habitantes.
13.700 son extranjeros, que representan el 27% de la población.
La colonia italiana suma 3.000 personas.
En la localidad del cantón de Berna conviven 130 nacionalidades.
La primera Conferencia Nacional Tripartita sobre el tema de la integración, celebrada el 19 de mayo, reunió a representantes de sindicatos y la patronal, además de miembros de los Ejecutivos comunales, cantonales y el Gobierno federal.
Entre otros puntos cruciales se destacó la importante de una integración lograda como elemento fundamental para garantizar la cohesión social y la prosperidad de la economía suiza.
Los esfuerzos deben ir acompañados de un compromiso por parte de los inmigrantes que tienen que dar un paso para acercarse a la cultura que los acoge.
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