Perspectivas culturales de Suiza para 2023
El panorama mundial para 2023 puede estar ensombrecido por la recesión, la inflación y la guerra, pero el futuro parece brillante en la escena artística suiza. Además de sus numerosos festivales y ferias de fama mundial, el año 2023 tiene reservadas muchas gratas actividades artísticas.
Los activos digitales vinculados a obras de arte solían estar de moda. Ahora ya no. Como predijo SWI swissinfo.ch, la burbuja de las NFT estalló mucho antes del colapso de la bolsa de criptomonedas FTX. El rastreador nonfungible.com muestra que 2022 estuvo marcado por una tendencia constante a la baja en los volúmenes de ventas y acuerdos de arte.
Sin embargo, las NFT no están muertas. Business WireEnlace externo predice que el sector de las NFT en Suiza crecerá un 46,2% anual hasta 2028. Teniendo en cuenta que 2022 se cerró con un volumen de 323,1 millones de dólares (297,3 millones de francos suizos), la suma para 2028 ascendería a 1 600 millones de dólares.
Las obras de arte representan actualmente apenas el 2% del mercado NFT, que comprende juegos, herramientas, piezas de colección y bienes raíces virtuales metaversos. Sin embargo, las ventas de arte digital impulsaron la recuperación del mercado mundial del arte en 2021 y 2022. El primer semestre de 2022 experimentó un volumen de ventas mundiales de arte aún mayor que el de los años anteriores a la pandemia (7 000 millones de dólares). La guerra, la enfermedad y la inflación no han hecho mella en el gasto de las élites adineradas amantes del arte.
Basilea marca la pauta
Compradores y coleccionistas de altos vuelos acudieron en masaEnlace externo en 2022 a Art Basel, la primera edición de la feria de arte más importante del mundo que se celebró libre de las restricciones de COVID. Para 2023 cabe esperar mucho de lo mismo, aunque Art Basel ya no puede considerarse una institución suiza.
La pandemia afectó gravemente a Art Basel y a sus otras ferias de marca (Hong Kong y Miami), y provocó que su consorcio financiero, la empresa internacional de mercadotecnia en vivo MCH Group, vendiera el 44% de sus acciones a James Murdoch, hijo del multimillonario magnate de los medios de comunicación Rupert Murdoch.
Su empresa de inversión privada Lupa Systems inyectó 48 millones de francos suizos en MCH en agosto de 2020, estabilizando las finanzas de MCH y reorientando su estrategia de expansión lejos de las ferias de arte. La tradicional feria de relojería y joyería Baselworld ya había sido cancelada a principios de 2020.
La supervivencia de Art Basel Hong Kong sigue en el aire debido a los estrictos controles establecidos en torno a la expresión política y artística impuestos por las autoridades chinas en los últimos años. Sin embargo, el pasado mes de octubre, MCH dio un paso adelante con la inauguración de una nueva sede en la capital francesa, llamada Paris+ par Art Basel. Sea como fuere, la MCH de Basilea marcará la pauta de las ferias de arte más importantes del mundo en 2023 y ofrecerá nuevas delicias en Suiza.
De las polémicas a las retrospectivas
El año 2022 fue bastante agitado en cuanto a los prolongados debates sobre la restitución de obras de arte, en concreto del arte robado por los nazis (o vendido bajo coacción nazi).
El acalorado debate en torno a la procedencia de las obras de arte pertenecientes a la colección del magnate suizo del mercado de las armas, Emil Bührle, se ha enfriado, pero sigue sin lograr una solución óptima. La controversia dio lugar a una mociónEnlace externo en el Parlamento suizo para crear una comisión independiente para evaluar las reclamaciones de “bienes culturales perdidos como consecuencia de la persecución nazi”.
El debate actual gira en torno a la terminología jurídica, ya que el Gobierno aprobó parcialmente una moción parlamentaria con un sutil cambio de palabras que no diferencia el arte directamente saqueado o robado por los nazis de las obras de arte que, coaccionados, los judíos tuvieron que vender a bajo precio
Mientras tanto, el Museo de Bellas Artes de Berna (Kunstmuseum Bern), depositario de la tristemente célebre colección Gurlitt, muestra hasta el 15 de enero la exposición Taking Stock. Gurlitt in Review (Un balance. Gurlitt en revisión) que muestra las directrices éticas, el marco legal y los resultados de la investigación internacional sobre la procedencia de la colección.
+ Kunsthaus de Zúrich: ¿un “museo contaminado”?Enlace externo
El enfoque transparente adoptado por el museo bernés contrasta fuertemente con el de su homólogo de Zúrich con respecto a la Colección Bührle.
La Kunsthaus Zurich, dispuesta a dejar atrás la polémica, mantuvo en 2022 el foco de atención sobre los artistas contemporáneos suizos de la llamada generación de 1968. Tras una cuidada retrospectiva de Jean-Frédéric Schnyder,Enlace externo se centró en las obras de Markus Raetz, un artista injustamente olvidado que falleció en 2020.
El programa del museo para 2023 sigue una línea más vanguardista y contemporánea. Por ejemplo, con una exposición sobre Marcel Broodthaers,Enlace externo poeta belga (1924 – 1976) y uno de los pensadores más originales sobre los principios del arte y la función de los museos.
El museo inaugura una colección de la obra gráfica, fotografía y cine de Broodthaers, que complementa una reciente muestra de sus llamados poemas industriales en el Museo MASI de Lugano.
Otra exposición imprescindible del Museo de Arte de Zúrich entrelaza el arte occidental con el islámico: Re-OrientationsEnlace externo: Europe and Islamic Art, from 1851 to today (Re-Orientaciones: Europa y el arte islámico, de 1851 a nuestros días).
Por último, no debe perderse la retrospectiva de la artista alemana Käthe KollwitzEnlace externo (1867-1945), famosa por sus desgarradoras representaciones de la violencia y la opresión entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial.
Arte ucraniano en el exilio
La Galería Nacional de Arte de Kiev logró enviar una parte sustancial de su colección bajo el resguardo de instituciones occidentales. Suiza se ve recompensada con dos respetables exposiciones de arte ucraniano. El Museo de Arte e Historia de Ginebra exhibe (hasta el 23 de abril) Du Crépuscule à l’Aube (Del crepúsculo al alba), una selección de obras maestras del patrimonio artístico ucraniano comisariada a través del prisma de la lucha entre las fuerzas de la luz y la oscuridad.
Paralelamente, el Museo de Arte de Basilea presenta otra selección de la galería de Kiev, Born in UkraineEnlace externo (Nacido en Ucrania), con obras que arrojan muchas luces sobre la cuestión de la identidad nacional ucraniana, reprimida por Rusia durante siglos -desde la época zarista hasta el régimen estalinista, y ahora de nuevo.
Los ucranianos también se apoderan del escenario suizo. El teatro Schauspielhaus de Zúrich presentó en diciembre la obra Bad RoadsEnlace externo (Malos Caminos) una producción escénica del teatro Left-Bank (Kiev) que trata de una Ucrania devastada por la guerra y que ha viajado mucho por Europa desde el comienzo de la contienda. Pero en mayo, el director artístico del Left Bank, Stas Zhyrkov, vuelve a Zúrich con su versión de Antígona
Estrellas extranjeras en escena
A pesar de la disminución del número de espectadores -fenómeno que ha afectado a cines, teatros y artes escénicas en general desde el comienzo de la pandemia-, la SchauspielhausEnlace externo ha invertido en un programa internacional más amplio con varios directores de escena extranjeros en residencia, y el próximo año promete mucho.
La coreógrafa estadounidense Trajal Harrell, que puso en escena la primera pieza de danza en el teatro zuriqués en 2020, volverá en abril con El Romeo, “una danza que personas de todos los orígenes, géneros y generaciones, de todos los temperamentos y estados de ánimo, interpretan cuando han dejado atrás sus tragedias y se limitan a bailar”.
El teatro de Zúrich presenta también, hasta abril, una versión de PinocchioEnlace externo creada por el cineasta, artista e intérprete estadounidense Wu Tsang. Mezclando movimiento, poesía, música y realidad virtual, la representación es “apta a partir de 7 años”, según el programa. Y, por último, no menos interesante, la aclamada directora brasileña Christiane JatahyEnlace externo cierra en febrero su trilogía del horror antiBolsonaro con Después del silencio.
En la Suiza de expresión francesa, el Ballet del Gran Teatro de Ginebra designó al coreógrafo belga-marroquí Sidi Larbi Cherkaoui para dirigir su temporada 2022-23. Cherkaoui es probablemente una de las estrellas emergentes más notables del panorama de la danza contemporánea, y lleva a Ginebra su aclamado Sutra, creado con el escultor británico Antony GormleyEnlace externo y con monjes del Templo Shaolin de China.
Una bonanza de películas suizas
Max Borg, corresponsal de SWI swissinfo.ch, informa de que el Festival de Cine de Solothurn (18-25 de enero) ofrecerá lo mejor de la producción suiza reciente.
La línea, de Ursula Meier, que recibió grandes elogios en la Berlinale de 2022, se estrena en los cines nacionales y extranjeros. Ya es una firme candidata para formar parte de la terna de candidatos suizos a los Oscar de 2024. Un trozo de cielo (Drii Winter), de Michael Koch, que ha tenido una buena acogida en los cines de la Suiza alemana, se proyectará en el resto del país.
La próxima edición del Festival de Cine de Berlín (Berlinale) anunció una obra suiza en su selección: L’Amour du monde (El amor del mundo), de Jenna Hasse. Se trata de la ópera prima de Hasse, una joven directora que ha cosechado éxitos en festivales -incluido Cannes- con sus cortometrajes.
También se estrenarán a lo largo del año, pensando en los festivales, Blackbird Blackbird Blackberry, de Elene Naveriani. Este último fue uno de los grandes descubrimientos de 2021 gracias a su película Wet Sand (Arena mojada), presentada en Locarno, y Electric Child (Niño eléctrico), de Simon Jaquemet, que arrasó en Toronto y San Sebastián en 2018 con Der Unschuldige (El inocente).
Si usted es amante del arte, Suiza no le decepcionará en 2023.
Adaptado del inglés por Marcela Águila Rubín
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