The Swiss voice in the world since 1935

Dentro del primer campus para ‘influencers’ de Brasil: 14.000 m², 200 estudios y una playa

Carlos Meneses

São Paulo, 17 oct (EFE).- Brasil acaba de abrir su primer campus para formar a ‘influencers’ con mentalidad empresarial. Es la escuela más grande del mundo de este tipo, según sus creadores. Tiene 14.000 metros cuadrados, unos 200 estudios y hasta una playa artificial.

Por fuera es un gigantesco almacén pintado de negro, por dentro un laberinto de escenarios con decenas de arcos LED para grabar videos, pódcast, sesiones de videojuegos y hacer directos en redes sociales.

Hasta el baño está pensado para «crear contenido». El de mujeres es de azulejos rosa chicle, cercado de espejos, con dos sillones de colores y tres cuadros estilo pop art de Marilyn Monroe, Tina Turner y Carmen Miranda.

La ‘Community Creators Academy’ está en la ciudad de São Paulo, cerca del principal mercado mayorista de Brasil. Empezó a recibir a sus primeros alumnos en agosto y ya tiene unos 400.

Para estudiar aquí, como en cualquier universidad, hay que superar un proceso selectivo.

Cursos de hasta 6.500 dólares

Ofrece cuatro cursos, aunque tiene en desarrollo otros seis. Hay desde cursos en línea por 3.000 reales (550 dólares) hasta mentorías semestrales por 35.000 reales (6.500 dólares). También hay becas.

«Todo aquí está centrado en generar contenido. Hoy saber crear contenido es como el inglés», dice a EFE Fabio Duarte, fundador y CEO del centro, mientras pasea por las instalaciones del complejo.

El espacio es tan grande que dentro tienen un carro de golf y hay gente que va en monopatín.

Duarte tiene 45 años y ha dedicado la mitad de su vida a trabajar en el mercado de entretenimiento y publicidad. Junto con su hermano fundó la Agência California, que atiende a gigantes como YouTube o Disney.

Hace cuatro años gestaron la idea de una escuela para profesionalizar a ‘youtubers’, ‘tiktokers’, ‘instagramers’ y ‘streamers’ a fin de «escalar y monetizar de verdad su influencia».

Para ello se aliaron con Ânima Educação, dueña de las universidades privadas Anhembi Morumbi y São Judas. Al proyecto también se han unido marcas como Universal Music, Samsung, YouTube, Instagram, Natura y Uber, entre otras.

Duarte explica que no pretenden enseñar a «viralizar», sino a desarrollar «carreras sólidas». «Entender a la audiencia es más importante que tener seguidores», sostiene.

El sueño de monetizar

Su apuesta se fundamenta en una tendencia al alza. En un mundo en el que cada vez tiene más peso la imagen, una encuesta de 2022 reveló que el 75 % de los jóvenes brasileños sueña con ser ‘influencer’.

Thaina Cazetta, de 28 años, posa delante de su celular con su ‘vestimenta del día’ en uno de los escenarios de la escuela.

«Mi profesión es ‘nail designer’ (diseñadora de uñas), pero ahora estoy 100 % centrada en ser creadora de contenido», dice a EFE.

Ganó su plaza gracias a un convenio con la también agencia de publicidad Digital Favela. Cazetta vive en Cidade Tiradentes, uno de los barrios más humildes de São Paulo.

Se define como una persona «muy ansiosa». Su religión es el candomblé, de raíces africanas. Y lo que antes era un pasatiempo, ahora quiere que sea su modo de ganarse la vida. Su meta, producir «contenidos reales que conmuevan a las personas».

Explica que su curso tiene una parte teórica y otra práctica. Para ella «está siendo sensacional». «A veces me rompo la cabeza porque hay muchos nombres técnicos y todo es muy nuevo, pero lo estoy aprovechando para evolucionar», expresa.

Hoy le toca una clase sobre el poder de la oratoria y «cómo hacer una presentación con autenticidad». Una de sus compañeras es Yaska Cocovick, de 32 años y ascendencia rusa. «Soy ‘creator’ desde hace ocho años», afirma.

Empezó en el mundo del maquillaje y «hoy su foco es familia, maternidad, bienestar» y enseñar «a las mujeres a ser femeninas en la práctica».

Conoció el campus a través de una amiga. Se inscribió y pasó las cuatro etapas de selección. Empezó en agosto y finaliza en diciembre.

«Es un cambio de mentalidad. Estoy saliendo de solo crear, de venta de publicidad, a ser dueña de mi marca», apunta.

Cocovick es madre de una niña, cuenta con 110.000 seguidores en Instagram y asegura que, de media, tiene ingresos mensuales de entre 3.500 y 4.500 dólares.

A su juicio, para tener éxito como ‘influencer’ es imprescindible «el respeto», la «ética profesional» y, sobre todo, ser «auténtica». EFE

cms/mp/gad

(foto)(video)

Los preferidos del público

Los más discutidos

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR

SWI swissinfo.ch - Sociedad Suiza de Radio y Televisión SRG SSR