El WEF en cifras: lo destacado y lo horroroso
Al Foro Económico Mundial de Davos (WEF) 2023 volvieron los apretones de mano. Y lo hicieron con tal vigor que el servicio de objetos perdidos del Centro de Congresos se saturó de guantes extraviados. La pandemia de COVID parecía estar en el retrovisor, aunque los participantes debieron efectuarse pruebas de saliva al comienzo del evento. Pocos llevaban mascarillas. La mayoría había adoptado el código QR -popularizado por la pandemia- para intercambiar tarjetas de visita digitales.
Para dar cuenta de los altibajos del WEF, suele ser conveniente recurrir a las cifras. He aquí algunas de las más destacadas.
82
Es la edad del fundador y presidente del Foro Económico Mundial, Klaus Shwab, quien dio una calurosa bienvenida a las élites empresariales y políticas mundiales a la Montaña Mágica junto con el presidente suizo Alain Berset. Mientras tanto, un número no revelado de empleados del WEF expresó al periódico británico The GuardianEnlace externo su preocupación sobre el hombre que lleva 52 años al timón del evento. La cuestión de la sucesión parece incómoda y rodeada de misterio.
“Klaus elige a sus líderes con los mismos criterios que Putin utiliza para elegir a los diputados de la duma estatal: lealtad, astucia y atractivo sexual”, afirmó el grupo.
2/3
Perspectivas de los economistas en jefe del WEF: Casi dos tercios de unos 50 de entre ellos creen probable una recesión mundial en 2023, el 18% la consideran extremadamente probable, más del doble que en la anterior encuesta, realizada en septiembre de 2022.
Solamente un tercio de los encuestados estima improbable una recesión mundial este año. Todos creen que habrá un crecimiento muy bajo, muy tibio, en 2023, con recesión o sin ella. Para Suiza, la Secretaría de Estado de Economía (SECO) prevé un crecimiento del 0,7% en 2023, frente al 2,1% de 2022.
8%
La ONG suiza Public Eye (Mirada Pública) hizo números y llegó a la conclusión de que el sector suizo de las materias primas aporta ahora más del 8% del PIB, frente al 3,8% habitual, como resultado del exceso de beneficios generado por la pandemia y la guerra en Ucrania. Instó al Gobierno y al Parlamento suizos a garantizar una distribución justa de los beneficios excepcionales obtenidos en tiempos de crisis, cuando millones de personas luchan por hacer frente a los elevados precios de la energía y los alimentos.
“Multiplicar por diez los beneficios en tiempos de crisis, como en el caso de Glencore, es claramente ilegítimo”, afirmó Public Eye en un informe publicado durante la semana del WEF. “En consecuencia, como ya se ha introducido en la UE [Unión Europea] y en varios otros países, debe aplicarse un impuesto especial sobre los beneficios excepcionales relacionados con la crisis de las empresas energéticas y de materias primas con sede en Suiza”
Los pocos ejecutivos del sector del petróleo y el gas que participaron en los paneles públicos del WEF respaldan la idea de una tasa sobre los beneficios extraordinarios. Los ejecutivos petroleros en general argumentan que tales medidas perjudicarán la inversión en energías renovables y socavarán el crecimiento económico. Este tipo de argumentos no impresiona a los jóvenes activistas del clima, como la sueca Greta Thunberg, quien se presentó en la Montaña Mágica y denunció que Davos es una reunión de gente que está en el centro mismo de la crisis climática: gente que invierte en combustibles fósiles.
“Estas personas van a llegar tan lejos como puedan. Mientras puedan salirse con la suya, van a seguir invirtiendo en combustibles fósiles, van a seguir arrojando a la gente debajo del autobús para su propio beneficio”, denunció en un acto paralelo al WEF.
El estruendo de los cañones de nieve artificial en torno a la ciudad más alta de Europa sirvió para recordar lo mucho que está en juego en la crisis climática. El perdurable amor del mundo por los coches se hizo patente en Davos, con lanzaderas eléctricas, Ubers, taxis, limusinas privadas y vehículos del WEF atestando las calles.
Al Gore, presidente y cofundador de Generation Investment Management, advirtió de que “la crisis [climática] empeora a una velocidad superior a aquella con la que estamos desplegando soluciones: las emisiones siguen en aumento”. Recordó a los líderes que “se prevé un aumento de los refugiados climáticos”.
87%
En la nueva era del trabajo híbrido, la mayoría de los empleados (87%) afirman estar cumpliendo en el frente de la productividad. Indicadores de productividad como las horas trabajadas, las reuniones a las que asisten y otras métricas de actividad recogidas en todo el mundo por Microsoft así lo confirman. Pero, a pesar de las pruebas, el 85% de los directivos de empresas no ven el duro trabajo de sus empleados y están sumidos en la “paranoia de la productividad”, recurriendo cada vez más a la tecnología para hacer un seguimiento de la actividad cuando en realidad deberían medir el impacto.
No solamente la productividad de los empleados es subestimada por los directivos.
23,84 billones de dólares
Los ciberataques aumentaron durante la pandemia a medida que la rápida adopción de dispositivos conectados se hizo crítica para el trabajo, la educación y la atención sanitaria. A pesar de la amenaza constante, los protocolos de seguridad están muy por detrás del creciente costo que suponen los ciberataques para la economía mundial, que se prevé que aumente de 8,44 billones de dólares (7,7 billones de francos suizos) en 2022 a 23,84 billones en 2027. Según el nuevo informe del Foro Económico Mundial, State of the Connected World 2023, solo el 4% de los expertos de todo el mundo “confía” en que los dispositivos conectados están debidamente protegidos
2%
Solamente el 2% de los 810 000 millones de dólares gastados en donaciones filantrópicas se destinó a reducir emisiones, según el WEF. El organismo lanzó una nueva iniciativa, Giving to Amplify Earth Action (Donaciones para ampliar la Acción por la Tierra GAEA) para aprovechar el capital filantrópico y ayudar a generar los 3 billones de dólares anuales necesarios para hacer frente al cambio climático y la pérdida de naturaleza.
Mientras tanto, un estudio realizado por South Pole, equipo de expertos con sede en Zúrich, ha revelado que, de las 60 000 empresas mundiales analizadas, solamente 1 075 -menos del 2%- tienen un objetivo corporativo de “neutralidad climática”. “La gente que sí lo haga [establecer objetivos] será criticada y se le pedirá que haga más”, afirmó Magdi Batato, vicepresidente ejecutivo de Nestlé a cargo de Operaciones, en el evento. “La gente que no lo hace se sale con la suya”.
2% es también la cantidad que reciben las mujeres fundadoras en el conjunto de la financiación de capital riesgo. The Female Quotien, una empresa propiedad de mujeres que promueve la igualdad en el lugar de trabajo, intenta cambiar esta situación creando un directorio de recomendaciones seleccionadas sobre las personas y los recursos necesarios para impulsar los negocios.
2 600 francos
En cuanto al hospedaje, el periódico Schweiz am Wochenende señala que un estudio de tres camas en el cantón de los Grisones tenía un costo de 2 600 francos suizos (2 800 dólares) la noche durante el WEF 2023 (16 al 20 de enero). Con los gastos de servicio y limpieza, el precio ascendía a 15 000 francos por las cinco noches del evento. En febrero, el mismo estudio se alquila por 150 francos la noche.
5 000
El Parlamento suizo renovó la autorización para que 5 000 miembros del ejército suizo garanticen la seguridad de unos 3 000 participantes en el WEF durante los años 2022 a 2024.
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